Tres personas fallecieron ayer en dos accidentes de tráfico registrados en las carreteras de Huesca y Teruel, respectivamente. Otro joven murió después de que la furgoneta que conducía se precipitara al pantano de Caspe y su cadáver tuvo que ser rescatado por buceadores del Cuerpo de Bomberos de Zaragoza.
El accidente que más graves consecuencias tuvo se registró en el término municipal turolense de Santa Eulalia, donde fallecieron dos jóvenes vascos en la autovía A-23. Los hechos ocurrieron a las 13.30 horas cuando el coche en el que viajaban las víctimas, un Peugeot 306 , se salió de la carretera por causas que se desconocen y volcó posteriormente a la altura del kilómetro 153.
Como consecuencia del accidente fallecieron los jóvenes Miren E. L., de 24 años, y Xavier A. A,, de 25, ambos vecinos de la localidad guipuzcoana de Ordizia.
El otro accidente con una víctima mortal ocurrió en el término municipal oscense de Candasnos a las 10 de la mañana. Los hechos ocurrieron a la altura del kilómetro 86 de la autopista A-2, cuando un vehículo 206, conducido por una persona de 67 años se salió de la carretera en circunstancias que aún no han sido esclarecidas.
A raíz de este suceso falleció una mujer de 60 años, cuya identidad no se ha facilitado, y resultaron heridos leves tanto el conductor como los otros tres ocupantes ocupantes del vehículo, la hija de los anteriores, de 36 años, un varón de 39 y un niño de 10. Los heridos, todos ellos vecinos de Madrid, fueron trasladados al hospital Arnau Villanova de Lérida, mientras que el cuerpo de la fallecida se trasladó al depósito municipal de cadáveres de Fraga.
AHOGADO Otro joven de 30 años, identificado como Santiago S. A. y vecino de Badalona, murió ahogado después de que la furgoneta que conducía Peugeot Spear se precipitara al embalse de Caspe, cerca del embarcadero y de la urbanización Pescadores.
El suceso ocurrió a las cuatro de la tarde y el accidente contó con testigos que alertaron al 112 y señalaron que la furgoneta siniestrada, con matrícula de Barcelona, estaba ocupada por una persona.
Efectivos de bomberos y de la Guardia Civil se desplazaron al lugar de los hechos y un equipo de buceadores rastreó la zona del pantano donde había caído el vehículo, en un punto conocido como de San Bartolomé, donde se localizó la furgoneta y a su conductor.
Por otra parte, la operación regreso del pasado fin de semana, que se había cobrado una víctima mortal en la madrugada del domingo en la localidad de Arcos de la Salina (Teruel), se cerró por la tarde con otros dos accidentes en la provincia de Huesca, en Almudévar y Peñalba, respectivamente, con un balance de tres heridos de gravedad y otros tres con lesiones leves.
Fuentes de la Dirección General de Tráfico informaron de que en los meses de julio y agosto fallecieron 44 personas como consecuencia de accidentes de tráfico en las carreteras aragonesas. La estadística refleja las muertes producidas en las 24 horas siguientes a los accidentes.
En total se produjeron 33 accidentes en la comunidad, en los que también sufrieron heridas de gravedad 21 personas, mientras que otras 14 fueron asistidas de lesiones leves. En estos meses fallecieron en las carreteras españolas 852 personas.
