La junta de compensación no quiere hacer demasiadas declaraciones sobre la polvareda suscitada en torno a las obligaciones de urbanización de los propietarios de suelo de Arcosur y, sobre todo, del impago de los 5,7 millones de euros acordados en abril para la liquidación de las obras del corredor verde Oliver-Valdefierro. Pero, sobre este último asunto, añadieron un elemento novedoso que puede encender el debate político. El presidente de la junta, Antonio Olmeda, aseguró ayer en declaraciones a este diario que "la liquidación se acordó condicionando ese pago a poderlo abonar con suelo". De manera que, a su juicio, a nadie debería sorprenderle ahora que se plantee la suspensión de ese cobro y que se acepten terrenos o pisos como moneda de cambio, porque era una solución pactada ante la complicada situación económica de la junta de compensación.

Sin embargo, en los papeles firmados en primavera por la junta de compensación no aparece por ningún lado, por escrito, ese acuerdo al que se refiere ahora Olmeda. Tampoco en su día se anunció así. Y, lo que es más importante para el Gobierno actual, no tiene validez jurídica que se planteen entregar los 1.667 pisos del nuevo plan de viabilidad porque, oficialmente, estas ni siquiera están en el mapa del barrio.