Varios centenares de personas participaron ayer en la marcha de protesta contra la construcción del embalse de Mularroya, en el cauce del río Grío, organizada por Jalón Vivo y Coagret (Coordinadora de Afectados por Grandes Embalses y Trasvases).

El acto de protesta, que comenzó a las diez de la mañana en la plaza de Morata de Jalón, incluyó un recorrido por varios de los parajes que se verán afectados por la construcción del embalse, que afectará a varias zonas inicialmente incluidas en la Red Natura 2000 por su riqueza ecológica.

El proyecto de Mularroya, cuyas obras de construcción comenzaron hace dos años, es uno de los que más contestación ha levantado de todos los incluidos en el Pacto del Agua de Aragón.

Varias sentencias han cuestionado la idoneidad de la ubicación de la presa al considerar que la masa de agua inundará algunos parajes calificados como zepa (Zona Especial de Protección de Aves) o LIC (Lugar de Interés Comunitario). Sin embargo, el proyecto salió finalmente adelante.

El embalse de Mularroya tiene como finalidad garantizar el suministro de caudales a la zona media y baja de la ribera del Jalón mediante el almacenamiento de agua en el cauce del Grío y su posterior trasvase al cauce principal, del que este es tributario.