El trágico accidente de un anciano de 88 años que murió hace unos días por circular en sentido contrario por la autopista ha reabierto el debate sobre la posibilidad de regular o no la edad máxima para conducir. En Aragón existe un total de 62.585 personas mayores de 70 años con permisos y licencias de conducir en vigor, lo que supone casi un 5% de la población total de la comunidad. Al menos, estos son los datos que maneja la Dirección General de Tráfico y que datan del año 2007. Todas estas personas tienen la posibilidad de renovar su carnet cuantas veces quieran, siempre que aprueben las pruebas médicas que se exigen a cualquier otro conductor. En este sentido, no hay ningún tipo de restricción por máximo de edad, de ahí que personas de 70, 80 años o incluso mayores puedan manejar un automóvil sin ningún problema de acuerdo a las normas.

No obstante, los mayores de 70 años sí que están sujetos a un régimen especial en lo que a la renovación de su permiso se refiere. La DGT establece que la licencia de quienes han superado esta edad es de solo dos años, frente a los periodos más amplios de conductores más jovenes. En concreto, hasta que se cumplen los 45 años el carnet se renueva cada diez años; entre esta edad y los 70, cada cinco, y a partir de este momento es cuando los plazos se acortan hasta los 24 meses que dicta la norma.

Los requisitos que estas personas deben cumplir para poder obtener la renovación del permiso son exactamente los mismos que se exigen cualquier otro conductor. No hay ningún tipo de prueba médica especial para ellos, sino que están sujetos a los mismos exámenes que el resto: de vista, de oído, de habilidad, etc. Como explican en diferentes centros médicos donde se expiden este tipo de pruebas, solo si los mayores de 70 años tienen algún tipo de minusvalía se les aplica el mismo criterio restrictivo que al resto de conductores, como la prohibición de circular a más de una velocidad concreta.

LAS CIFRAS NACIONALES En España hay más de 2.300.000 conductores mayores de 65 años y la cifra aumenta año tras año como consecuencia del envejecimiento de la población. El caso de Japón es paradigmático ya que en este país se inició hace unos meses una campaña para que quienes superasen esta edad entregasen, de forma voluntaria eso sí, su carnet a cambio de descuentos y regalos. La medida se tomó después de que las autoridades comprobasen que el número de accidentes en los que se ven involucradas personas mayores de 70 años ha aumentado un 35%. En Italia, mientras, que los incidentes provocados por conductores se hayan incrementado un 17% en los últimos años ha provocado que se tomen nuevas medidas, como nuevos exámenes psicotécnicos específicos y chequeos más profundos a partir de los 65 años.