El Ayuntamiento de Zaragoza inauguró ayer una placa junto a la fachada del consistorio en memoria de «los cargos electos y los empleados municipales asesinados tras el golpe militar de julio de 1936 contra la legalidad constitucional de la II República».. Ante cientos de personas del VI Encuentro Transfronterizo de Asociaciones de Memoria Histórica congregadas en torno a esta placa en la plaza del Pilar, el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, aseguró que van a continuar en este camino de lucha contra el olvido. Apuntó que han sido los nietos de «las 134.000 personas que todavía están en las cunetas» los que han enarbolado la bandera de la dignidad y de la reparación de la memoria histórica de españoles que fueron asesinados por «mantener la legalidad». Asimismo, agradeció la presencia de los «compañeros socialistas”, que fueron los que «más gente dejaron en esta lucha», afirmó. En el acto se oyeron emocionados vivas a la República.