Zaragoza registró durante el pasado año 398 notificaciones de desamparo o de presuntos malos tratos a un total de 665 niños. De las que fueron valoradas ese año, solo en un 16% fue una falsa alarma. En 306 casos procedió a actuar con los diferentes programas con los que cuentan tanto el consistorio zaragozano como el Gobierno de Aragón. En una de cada tres denuncias registradas se tuvo que hacer cargo el servicio de Menores del Instituto Aragonés de Servicios Sociales.

Son datos de la memoria del área de Acción Social del Ayuntamiento de Zaragoza que esta semana se presentó para su estudio en el consejo sectorial, un órgano interinstitucional que cuenta también con representación de otros colectivos como Cáritas, la fundación Federico Ozanam y un largo etcétera. Según el acuerdo de colaboración entre el consistorio zaragozano y la DGA, los centros municipales de servicios sociales llevan a cabo el estudio, valoración y diagnóstico de todas las notificaciones de malos tratos que se producen en la capital aragonesa o de la diferente casuística que engloba el desamparo de los pequeños. Las cifras permanecen casi estables a lo largo de los años --con un pico en el 2012--, con entre 300 y 400 notificaciones cada año, que pueden alcanzar los 600 o 700 afectados.

En el pasado año hubo en los centros un total de 398 notificaciones. De estas ni una sola procedió del propio niño afectado, lo que revela la importancia de los protocolos de detección. La mayor parte de las alertas surgieron de los propios servicios sociales, que acapararon el 31% de las notificaciones totales (126).

Le siguen los centros escolares, con 89 avisos y un 22% del total; y en tercer puesto el entorno del propio menor, con otras 80 alertas, que suponen otro 20% de la cifra global. De estas 80, 51 son interpuestas por el propio madre o padre de los pequeños. Ya en menor medida, otros 38 avisos procedieron de los servicios sanitarios, 48 de la Policía, 11 de la administración de Justicia, 4 fueron anónimas y otras 2 de otras procedencias.

El informe desglosa por barrios también las notificaciones y el número de menores afectados, que asciende a 665. El Arrabal es la zona que más notificaciones registró el pasado año, con 57 que afectaban a 97 menores; seguidos de San José, con 51 avisos que concernían a 83 menores; y Torrero, con 39 alertas sobre 61 pequeños. Delicias (37 casos), San Pablo (29) y Actur (27) le siguen en la lista.

EQUIPO MULTIDISCIPLINAR

Cuando llegan las notificaciones a los distintos centros de servicios sociales, se pone en marcha un equipo multidisciplinar que integra un psicólogo, un trabajador social y un educador. Una vez que se estudia caso por caso se puede no efectuar ninguna acción, al no apreciarse riesgo alguno --ocurrió en el 16% de los casos--; o en último extremo derivar la denuncia al servicio de Menores del Instituto Aragonés de Servicios Sociales del Gobierno de Aragón para tomar las medidas oportunas.

Durante el 2014, de las 398 notificaciones se valoraron 366 --las que se produjeron a finales de año se estudiaron ya en el 2015--, de las que 60 concluyeron con que no había riesgo para el menor. Otros 130 casos quedaron en seguimiento de los servicios sociales municipales, 42 fueron derivados a un programa de apoyo familiar y en 134 casos, los más graves, se notificó a la DGA. Un 36% del total.