El exalcalde republicano de la capital aragonesa, Manuel Pérez Lizano, ya tiene retrato oficial. Setenta y cinco años después de que terminara su mandato (1932-1933), la ciudad reconoce ahora su labor como primer edil. La pintura, que lleva la firma de Sergio Abraín, se colgará en las paredes del salón de recepciones del Ayuntamiento de Zaragoza, junto a las figuras de otros 19 alcaldes.

La historia municipal del salón de recepciones empieza con la lámina de Luis Franco y López, que estuvo al frente de la política municipal entre 1850 y 1876. El último retratado es José Atarés, el anterior alcalde, mientras que el actual, Juan Alberto Belloch, será colgado en las paredes del salón de recepciones cuando finalice su mandato. Ahí compartirá un trocito de la historia con otros socialistas como Antonio González Triviño o Ramón Saínz de Varanda y la popular, Luisa Fernanda Rudi, la única mujer que ha ocupado este cargo hasta la fecha.

Al acto de homenaje acudieron tanto Belloch como Atarés, quienes reconocieron que "ninguno saldrá tan bien en el retrato como Pérez Lizano", que tenía 35 años cuando fue elegido alcalde. También participaron en el reconocimiento el resto de los portavoces municipales --el retrato se encargó a propuesta de CHA--, el exteniente de alcalde de Urbanismo y presidente de la Asociación de Exconcejales, Luis García Nieto, y el presidente de la DPZ, Javier Lambán, como republicano reconocido y porque en 1932 el alcalde de la ciudad era también el presidente provincial a través de una comisión gestora.

Tanto Belloch como el sobrino del exalcalde republicano, Manuel Pérez Lizano, compartieron los elogios al retratado. El alcalde destacó su larga trayectoria de servicio a la ciudad, sus cualidades como médico y su amor hacia la Cruz Roja, cuyos servicios de vigilancia encontrarían un día su cadáver en 1933. "Era el hombre de Azaña en Aragón", dijo Belloch. El sobrino del exprimer edil rememoró sus amistades anarquistas, masonas y artísticas.