La anulación por el Tribunal Supremo del Plan General de Ordenación Urbana de Montanuy por carecer de estudio de impacto medioambiental supone un freno al proyecto de ampliación de Cerler impulsado por la DGA y Aramón desde el 2006. El Gobierno de Aragón insiste, no obstante, en que si se resuelven las prescripciones medioambientales, el proyecto tendría el apoyo del Ejecutivo y Aramón. Primero hay que cumplir con los pasos que exige la ley y, vistos los avances que se han registrado en una década y el imprevisible futuro del sector de la nieve, la iniciativa no está nada clara.