Javi Ros pasó la noche en el Hospital Quironsalud en observación después de sufrir un fuerte golpe mandibular mediada la segunda mitad, del que fue atendido, saltó al campo de nuevo y se tumbó unos minutos después al no encontrarse bien y sentirse conmocionado. Abandonó el campo en camilla en el 75. Fuentes cercanas al jugador, que estaba acompañado por su pareja, aseguraban anoche que el centrocampista se encontraba bien, pero los médicos le hicieron todas las pruebas para descartar cualquier lesión cerebral. En principio, se quedó ingresado solo por precaución y, si hoy la evolución es la esperada, dejará el centro sanitario.

Javi Ros, en todo caso, va a tener más tiempo para recuperarse de ese fuerte golpe que le propinó de forma involuntaria el jugador del Reus Vaz, ya que en Cádiz cumple ciclo de amonestaciones tras ver ayer la quinta amarilla, por lo que será baja por sanción en el Ramón de Carranza.

Ante el Reus su sitio junto a Zapater lo ocupó Álex Barrera, mientras que la otra alternativa de Agné sería ubicar en la medular a Erik Morán, cuyo protagonismo ha sido residual, solo 13 minutos, desde la llegada del nuevo entrenador y que es el candidato más claro ahora mismo a dejar el equipo zaragocista en el mercado de enero.

Mientras, la plantilla volverá a ejercitarse esta mañana (10.30 horas) en la Ciudad Deportiva tras el partido de ayer frente al Reus y para empezar a preparar el duelo del sábado en Cádiz. Los jugadores guardarán jornada de descanso mañana.