Una delegación de 15 técnicos de la administración armenia, ha visitado durante esta semana las zonas más representativas del sistema de riego de Bardenas en compañía del presidente de la Federación Nacional de Regantes, Andrés Del Campo García. El objetivo de esta visita ha sido que Armenia pueda copiar el modelo español de riego.

El motivo por el que se ha elegido el sistema de Bardenas como ejemplo español, es que cuenta con una comunidad de base y además se encuentra en plena modernización, por lo que, según el presidente de la federación nacional, "será más fácil de entender para nuestro amigos armenios cómo implantamos la tecnología en materia de agua".

Durante la visita, los representantes de los regantes armenios, junto a funcionarios de este país, tuvieron la oportunidad de visitar las instalaciones hidráulicas de la Comunidad General de Regantes de Bardenas, como son el embalse de Malvecino, la minicentral de Cinco Villas y la Balsa de Bolaso, así como las transformación en riego de las 600 hectáreas del Saso.

En este momento Armenia cuenta sólo con 54 comunidades de regantes, puesto que hasta el año pasado no se comenzaron a implantar en el país estas organizaciones. Según Del Campo, el modelo español "tiene mucho que enseñar al resto del mundo, ya que contamos con comunidades milenarias que han superado tiempos de guerra y dictadura". En este sentido, el presidente de la Comunidad General de Regantes de Bardenas, Luis Ciudad, apuntaba que "han sido los propios regantes lo que se han sabido repartir equitativamente el agua agrupándose en comunidades al margen del régimen político vivido".

ASUNTOS PENDIENTES Algunas de las cuestiones que salieron a relucir durante la visita fue la apuesta del máximo dirigente de los regantes por la construcción de embalses en los países de climas mediterráneos porque "no tiene sentido modernizar si no se dispone de agua suficiente para competir en el mismo mercado que los países que no necesitan estas infraestructuras", explicó. Además, Del Campo aseguró que la solución para tener agua suficiente no puede pasar por las desaladoras que propone el Ministerio de Medio Ambiente ya que los precios del agua no resultan competitivos.