El Burgo de Ebro ha apostado por recuperar e impulsar el conocimiento sobre su pasado romano organizando una semana monográfica que arranca mañana con un mercado. Durante todo el día, a partir de las 11.00 horas, se sucederán distintas representaciones ambientadas en esa época y exhibiciones de gladiadores, una puesta en escena a cargo de la compañía Pingaliraina que se completará con un mercado y con ambientación callejera.

El ambiente festivo va a marcar toda esta jornada. También se ha programado una charla sobre la romanización de El Burgo, un anticipo de toda una semana dedicada a difundir las huellas que el Imperio Romano dejó a su paso por el valle del Ebro, en el siglo II antes de Cristo.

Los indicios más importantes de la época romana de El Burgo de Ebro se encuentran en La Cabañeta, un yacimiento arqueológico excavado desde hace más de una década y que se extiende sobre un terreno de 30 hectáreas. El ayuntamiento, con el objetivo de promocionar este asentamiento romano, ha preparado visitas guiadas en los próximos días tanto a La Cabañeta como a la sala de exposiciones donde se muestran alguna de las piezas de más interés de este yacimiento. Esta sala se inauguró en el año 2001 y hoy en día sólo se abre al público en caso de visitas concertadas.

José Antonio Mínguez, profesor de la Universidad de Valladolid, y el arqueólogo Antonio Ferreruela son los responsables de la excavación del yacimiento y de las visitas guiadas que se organizarán estos días. "Es un asentamiento romano republicano que se fundó entre el 150 y el 160 antes de Cristo y que fue destruido por el año 70 antes de Cristo durante las guerras entre Sertorio y Pompeyo", explicó Ferreruela.

El arqueólogo destacó el tamaño del yacimiento, con 20 hectáreas rodeadas por un foso y otras 10 en la zona exterior, y el valor de las termas públicas. Es aquí donde se está realizando la última campaña, que ha permitido sacar a la luz estos baños, con zonas diferenciadas para hombres y mujeres.

Además, la ciudad fue asaltada y arrasada, por lo que sus habitantes salieron de allí sin llevarse nada, lo que ha permitido encontrar una gran cantidad de cerámicas y otros objetos. Aún así, si no llegan más fondos, la campaña de excavaciones finalizará este mismo mes.