El Consejo de Gerencia de Urbanismo dio ayer el visto bueno a la concesión de un permiso a los padres Agustinos Recoletos para compatibilizar el uso de la iglesia de Santa Mónica como equipamiento religioso y como centro educativo. El expediente fue respaldado por todos los grupos menos por Izquierda Unida. El concejal de IU, José Manuel Alonso, rechazó este cambio de uso por considerar que este espacio no cumple los requisitos ni para centro de Primaria ni para escuela infantil.