La consejera de Educación del Gobierno aragonés, Dolores Serrat, pidió ayer a Zaragoza que sea "respetuosa" con la visita, el próximo lunes, del ministro José Ignacio Wert a la capital aragonesa para asistir, a partir de las 12.00 horas, a la inauguración oficial del curso académico.

Serrat asumió las protestas previas al acto porque son "legítimas" pero "siempre que sean respetuosas y no supongan un boicot al acto", matizó.

En este sentido, ya hay programada una concentración de protesta en el Paraninfo en la que tomarán parte alumnos y personal de la Universidad de Zaragoza, aunque también se sumarán, en las próximas horas, representantes de otros sectores de la enseñanza. "Seguro que la universidad entenderá la importancia de haber sido elegida como representativa del inicio del curso universitario" y se mostró convencida de que el acto "discurrirá sin dificultades".

MOVILIZACIONES Así, estudiantes, profesores y personal de administración y servicios del campus público se han unido para elaborar un manifiesto que leerán en la concentración. "No hay nada que celebrar", expuso Fernando Paz, consejero de gobierno de la Universidad de Zaragoza por el Colectivo de Estudiantes Progresistas de Aragón (CEPA).

De la misma manera,el colectivo Marea Verde también ha hecho un llamamiento a la "movilización" y a mostrar el "rechazo" de los centros a los recortes en materia educativa. En este caso, el lema elegido será Por la escuela pública de la república, en referencia, asimismo, a la presencia en el acto académico del Príncipe Felipe.

La celebración del acto en la capital aragonesa responde a la decisión del ministerio de establecer una rotación entre las comunidades autónomas para albergar este acto. Aunque el rector de la Universidad de Zaragoza, Manuel López, --que ha participado en concentraciones contra los recortes y que ha mostrado su rechazo a la reforma promovida desde el ministerio-- apuntó que "creemos que el ministerio ha elegido la Universidad de Zaragoza por razones de oportunidad porque, probablemente, sea un lugar favorable para poder hacer una apertura de curso que, posiblemente, pueda ser algo movida", indicó tras conocer la designación, a finales de julio. Ya entonces, López consideró que la elección habría respondido, en su opinión, a que el desarrollo del acto podría ser "más delicado" en caso de que se hubiera celebrado en "otras capitales".