El Tribunal Supremo acaba de dar un revés a los defensores de la conservación de la antigua fundición de Averly de Zaragoza, al inadmitir un recurso de la Asociación Pública para la Defensa del Patrimonio Aragónes (Apudepa) por un error formal, al presentarlo fuera de plazo.Aunque se trata de una mala noticia para la asociación y para el actual Ayuntamiento de Zaragoza (declarado defensor del inmueble),no es un golpe definitivo:los recursos que buscan ampliarla catalogación y protección del inmueble siguen bajo estudio del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA), y el consistorio negocia para suspender el planeamiento urbanístico que autoriza la construcción deviviendas en al menos el 70% dela actual superficie de la fábrica.
CAUCIÓN
El recurso inadmitido por el Supremo lo interpuso Apudepa en marzo del año pasado,ante al imposición del TSJA de una fianza de un millón de euros para mantener la suspensión cautelar de las obras de derribo.Concretamente lo dictó el 25 de marzo, y fue notificado aldía siguiente, pero no fue hastael 14 de abril cuando Apudepapresentó el recurso contra estadecisión. Una oposición que debióenviar en un plazo de diezdías, y que al ser superado la invalida,concluye la Sección Cuartade la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Supremo.Para la propietaria de los terrenos, Brial, esto supone la confirmación de que las medidas cautelares ya no son aplicables, y por tanto el consistorio debería proseguir con los trámites para la concesión de la licencia de derribo. Al menos del 70% que no está protegido como bien cultural. Pero el consistorio no lo ve así,según explicó ayer a este diario el teniente de alcalde de Urbanismo, Pablo Muñoz.Para este, ya falta de recibir notificación dela resolución y de que sus servicios jurídicos la analicen,se trata de una cuestión «de forma y no de fondo». Este, la catalogación de Averly, sigue en manos del TSJA y al menos esperarán hasta su resolución. «No tendría sentido derribar algo para queluego los tribunales digan que no tendría que haberse hecho». El consistorio mantiene paralizado el proceso desde hace más de un año, cuando empezó la controversia jurídica. Por aquel entonces, la Fiscalía expuso que tenía sentido mantener la situación paralizada mientras no se resolviese judicialmente, y a ese criterio se sigue ateniendo el ayuntamiento. Además, con la reciente inclusión de Averly en una lista de 50 joyas culturales en peligro del mundo, del Fondo de Monumentos del Mundo, la corporación municipal encontró otro argumento para la espera.
