Los servicios de limpieza se realizan a diario a través de trece equipos que se distribuyen por las distintas zonas de la capital aragonesa (incluyendo los barrios rurales). Los avisos y denuncias les llegan a través de los inspectores de urbanismo del ayuntamiento zaragozano; de su Oficina de Atención al Ciudadano, o de la propia empresa al realizar revisiones periódicas.