El rey Felipe VI se ha desplazado este martes a Huesca para asistir al desarrollo del ejercicio táctico Toro 21, con el que el Ejército pretende conseguir que el cuartel general de la División Castillejos, ubicado en el acuartelamiento Sancho Ramírez de la capital altoaragonesa, alcance una capacidad operativa plena en el despliegue de unidades y cuerpos de intervención.

El monarca, acompañado por el general jefe del Estado Mayor del Ejército, Francisco Javier Varela, y del general jefe de la División Castillejos, Carlos Jesús Melero, ha seguido parte del ejercicio desde el puesto de mando avanzado instalado en el interior del acuartelamiento oscense.

El ejercicio Toro 21, en el que participan alrededor de 900 efectivos, coordina desde el puesto de mando de Huesca el movimiento de unidades de la Castillejos ubicadas en las provincias de Almería, Zaragoza y Madrid, además de estar en contacto permanente con el cuartel general en España de la OTAN, con sede en Valencia.

El objetivo último de este ejercicio es certificar la capacidad operativa plena del cuartel general de la Castillejos como una división desplegable para el planeamiento y conducción de operaciones de alta intensidad contra un adversario de similares características y tecnológicamente avanzado.