Son muchos los gestos feos, demasiados discursos convertidos en trabas, dibujando un escenario propio, imposible en su concepción nacionalista, que podría terminar por dinamitar la candidatura olímpica de 2030. Viajó este martes a Zaragoza el presidente del COE, Alejandro Blanco, para reunirse con el presidente de Aragón, Javier Lambán, y para recordar que la única forma de conquistar los Juegos es a través del proyecto liderado por el Gobierno de España, el mismo que Pedro Sánchez fomentó en una visita al Pignatelli el pasado septiembre.

Blanco reforzó la postura aragonesa de unos JJOO que deben ser «en pie de igualdad o simplemente no serán», pero en Cataluña, adonde este miércoles se desplaza el máximo dirigente del olimpismo español "para dejar las cosas claras", el mensaje es bien diferente y se defiende que la candidatura que quiere el 'Govern' sea "impulsada y liderada desde Cataluña".

"El respeto, el entendimiento y el diálogo son las claves" según Alejandro Blanco, que lleva días apagando fuegos, sobre todo después de las declaraciones de la consejera de Presidencia de la Generalitat, Laura Vilagrà, en las que habló de una candidatura catalana que únicamente entendía la aportación de otros territorios como "colaboraciones", alejándose de la idea de tratar de igual a igual a Aragón en la aspiración de organizar por primera vez una cita olímpica en el Pirineo. Este martes llegó más leña, esta vez desde la portavoz del 'Govern', Patricia Plaja, que si bien repitió que su comunidad "está abierta a colaboraciones con otros territorios para las disciplinas que no se pueden celebrar en Cataluña", abundó en la idea catalanista de Vilagrà.

Después de tres años de conversaciones con el COE, este es un "momento crucial", reconoció el presidente aragonés tras la reunión con Blanco a primera hora. "España tiene posibilidades reales de armar una candidatura de la manera que marcan el COE y el COI", insistió Lambán, que recordó también la trayectoria de la comunidad en la organización de citas como la Universiada de Jaca.

Para este viernes está previsto que el presidente aragonés se reúna en Balaguer (cerca de Lérida) con su homólogo catalán, Pere Aragonès, para acercar posturas en torno a la candidatura. Sin embargo, el presidente de la Generalitat se encuentra confinado al ser contacto estrecho de un positivo en covid, de modo que la reunión está en el aire.

"Hay que recalcar que esta es una candidatura de país, no solo de Cataluña o de Aragón, sino del Gobierno de España. Nadie predomina sobre nadie"

Alejandro Blanco - Presidente del COE

"Tenemos opciones de que España organice los Juegos 2030 siempre y cuando Aragón y Cataluña vayan de la mano, lideradas por el COE", remarcó el jefe del Ejecutivo autonómico, que incidió en que es una semana «crucial» en la que se debe despejar el panorama de una candidatura que afronta un trimestre decisivo y que, cuando debería llevar una velocidad de crucero, anda encallada en debates políticos que despiertan recelos en el Pignatelli, donde no terminan de comprender la postura catalana, que puede ser una pose pero también una forma de acabar con un proyecto con el que nunca han mostrado especial entusiasmo.

"Hay que recalcar que esta es una candidatura de país, no solo de Cataluña o de Aragón, sino del Gobierno de España. Nadie predomina sobre nadie", dice Blanco, que asegura que continúa sin interferencias el "trabajo técnico" de la comisión formada por representantes de las tres instituciones: el Gobierno de España, el aragonés y el catalán. En Zaragoza avanzó también algunos de los plazos previstos para la presentación de la candidatura. El trabajo final se presentará con los presidentes Pedro Sánchez, Javier Lambán y Pere Aragonès, «a finales de marzo o principios de abril».

Candidatura sin nombre

De momento, la candidatura no tendrá nombre hasta que se cree la comisión política, que se constituirá después de la técnica, que está trabajando actualmente, y la de infraestructuras. «En la gran comisión, la comisión política, estarán los presidentes»· de los tres Gobiernos implicados y ahí será donde se decida el nombre», indicó Blanco, que aclaró que «aunque antes las candidaturas iban siempre vinculadas a ciudades, ahora eso ha cambiado. El COI puede llevar ciudades, territorios, países... Tenemos que encontrar el nombre en el cual todos los encontremos cómodos», y que parece que no será Pirineos por aquello de que la cordillera también es francesa.

Ante el planteamiento por parte de la Generalitat de una consulta a la ciudadanía a finales de primavera, Blanco descartó que esta consulta sea una votación decisiva. «Un referéndum sobre sí o no es inviable», no está «contemplado» por el COI y, por lo que él sabe, va a ser una mera consulta que aún no tiene concretadas las preguntas.

Faltaba por saber si el Govern se planteaba ampliar la consulta sobre la candidatura a las comarcas prepirenaicas como el Berguedà, el Solsonès y el Ripollès (Girona), pero el Ejecutivo catalán ha decidido ceñir la votación a las comarcas del Alto Pirineo y el Arán porque es donde el evento deportivo tendrá un «mayor impacto», según Patricia Plaja.