El paleontólogo zaragozano Ignacio Canudo ha formado parte del equipo que ha descubierto y descrito al Abditosaurus kuehnei, la primera especie de dinosaurio descubierta en el Pirineo. Esta semana el hallazgo fue publicado en la revista Nature Ecology & Evolution.

¿Cómo era el hábitat del ‘Abditosaurus kuehnei’, el dominio iberoarmoricano donde vivía, tenía algo que ver con la actualidad?

Era una gran isla, que ocuparía más o menos lo que hoy son los Pirineos y el sur de Francia. Pero era un terreno plano, nada que ver con la actualidad. Los Pirineos no es que no existieran, es que no había ni atisbo de ellos, faltaban casi 30 millones de años para que empezaran a surgir –el dinosaurio vivió hace alrededor de 70 millones de años-, son una cordillera moderna, que de hecho sigue creciendo. Subir al Aneto hoy es subir más alto que hace cien años.

¿Por qué es tan inusual que este dinosaurio fuera tan grande (se estiman 18 metros de largo y 14 toneladas, por los restos), y cómo se explica?

En las islas, el proceso evolutivo hace que los animales, sobre todo vertebrados y en particular los mamíferos, sean cada vez más pequeños, por una mera cuestión de recursos alimenticios. Con los dinosaurios pasaba igual, e incluso los más grandes, los saurópodos como este, se iban haciendo pequeños, de tres o cuatro metros en esta zona. Hace 70 millones de años parece ser que hubo una bajada del nivel del mar que creó un puente de tierra que permitió que este dinosaurio cruzase desde el norte de África. Era de tamaño normal para su especie, pero un gigante entre liliputienses en la isla.

Descubierta una nueva especie de dinosaurio que vivió en los Pirineos hace 70 millones de años ZML

Una especie, además, que no se había descrito hasta ahora.

Sí, es una especie nueva, no se había encontrado en ningún otro lugar, también por eso es especial. Es la primera descrita en el Pirineo, muy cerca de Aragón. Aquí no hemos encontrado restos tan completos, pero sí un fémur, que está en el museo (de Ciencias Naturales, que dirige), el primer indicio de que había especies grandes que habitaron la zona.

¿Aragón es muy fértil en cuanto a fósiles de dinosaurio o es que solo destacamos lo autóctono?

No, es una zona extraordinariamente rica en fósiles, pero tiene su explicación: en primer lugar, el Pirineo y el Sistema Ibérico sacan a la superficie rocas de la época de los dinosaurios al emerger. En segundo lugar, la desventaja de tener pocos árboles facilita, en cambio, que los restos estén expuestos. Y el tercer factor es que esta zona (lo que hoy sería Aragón, Cataluña y zonas de Castilla y León) era tierra firme entonces, otros lugares eran mar. A estos se suma que, hasta hace 15 o 20 años, no se ha comenzado a investigar en serio en España, en otros países europeos llevan desde el siglo XIX buscando fósiles.

¿Aragón puede dar aún sorpresas, entonces?

Desde luego, no hay más que ver el yacimiento de huevos de dinosaurio descubierto en Loarre. Estamos aún en una fase de muchos descubrimientos y sorpresas.

Excavación del 'Abditosaurus kuehnei' en el Pirineo catalán. SERVICIO ESPECIAL

¿Cómo es posible que el yacimiento donde ha sido hallado el ‘Abditosaurus kuehnei’ se descubriese en los años 50 del siglo pasado y quedara abandonado hasta en dos ocasiones?

Es un buen ejemplo de que en España no ha habido investigación. El primero que lo descubre es un alemán (Walter Kühne) de forma casi amateur, que llegaba andando al lugar desde el pueblo, con un guía local que picaba, y él iba extrayendo algún hueso. Un dinosaurio de este tamaño, que pesa toneladas –hizo falta una estructura metálica construida ex profeso y una grúa para sacarlo- no se puede extraer así. En los años 90 un grupo del ICP (Instituto Catalán de Paleontología) también lo intentaron, pero ya fue hace 15 años cuando nuestro equipo, ya de forma digamos más profesional, con maquinaria pesada, abriendo un camino y demás, y trabajando durante cuatro meses en tres años pudimos llegar a zonas a las que no se había llegado. Es una historia muy curiosa, de hecho hay hasta un documental (‘El último gigante de Europa’, de 2017) que se puede ver fácilmente (lo emitió Movistar+).

¿Están trabajando en algún proyecto que se pueda desvelar en el grupo de investigación Aragosaurus o en el Museo de Ciencias Naturales?

En Aragosaurus tenemos, con el yacimiento que le decía en Loarre, un proyecto muy bonito científica y socialmente. Vamos a poner en valor los 50-60 huevos con un espacio museístico, en el que además estamos montando un laboratorio para que las paleontólogas trabajen allí. De hecho se podrá interactuar con ellas y verlas trabajar. A veces la gente va al castillo de Loarre y no pasa por el pueblo, así habrá otro motivo para visitarlo, por lo que el proyecto no solo tiene valor científico sino que ayuda a que la potencial riqueza que se pueda generar se quede en la zona. Y merece la pena, porque los yacimientos de huevos de dinosaurios son extremadamente raros, a nivel mundial. En cuanto al museo, siempre estamos haciendo cosas; esta semana hemos inaugurado una exposición sobre los geoparques de Aragón, por ejemplo.