La gripe aviar vuelve a acechar a las granjas aragonesas. Desde hace ya varias semanas las granjas avícolas que trabajan con sus aves en extensivo han tenido que someterlas a una cuarentena y mantenerlas en el interior de las naves para evitar posibles contagios por contactos con otras aves portadoras de la enfermedad.

Aunque esta es una cuestión que se repite de forma continuada cada año, esta campaña los agricultores reconocen que hay una mayor preocupación ante el peligro de contagio debido a la aparición de focos en granjas de toda España. "Todos los años estamos al tanto porque son las aves migratorias que pasan por España las que lo transmiten pero normalmente solo son 2 o 3 casos aislados que se detectan en aves silvestres", comenta Eloy Ureña, representante del sector aviar en UAGA y en el COA. "Esta es la primera vez que vemos casos en granjas que ya de por si tienen a las aves internalizadas", añade el ganadero.

El representan del sector recuerda también que se trata de una situación circunstancial y que se espera que en varias semanas los animales puedan volver a salir al exterior y continuar con el proceso habitual en las granjas extensivas. "España y Aragón son simplemente zonas de paso durante la migración de las aves y terminan por irse y el peligro pasará, pero mientras tanto nuestro deber es mantener todas las cuestiones de bioseguridad posibles para evitar contagios", explica Ureña.

Sacrifican a más de 130.000 gallinas tras un brote de gripe aviar en una macrogranja de Valladolid

Sacrifican a más de 130.000 gallinas tras un brote de gripe aviar en una macrogranja de Valladolid Vídeo: Agencia ATLAS | Foto: EFE

La cuarentena de aves que están acostumbradas a la vida al aire libre supone un mayor estrés para los animales y una reducción de la producción ya que el número de aves que se acumulan en las naves es menor para garantizar el bienestar animal y cumplir con la normativa establecida. "En el último trimestre la producción se ha reducido un 3,3%", esta bajada se ha unido a la crisis derivada de la pandemia y a los sobrecostes en materia de energía y alimentación de los animales que está viviendo el sector avícola. "Dependemos mucho de la energía que ha subido entre un 100% y un 150% y los piensos también se están pagando entre 5 y 10 céntimos más caros que el año pasado", afirma Ureña.

Estos sobrecostes están suponiendo también un problema en los precios de los productos finales. "En es caso de las aves ponedoras los compañeros si que pueden repercutirlo en el precio de los huevos. Por el momento los huevos de las aves en cuarentena siguen vendiéndose a precio de gallinas extensivas porque se trata de una cuestión circunstancial", explica el ganadero. "En el caso de la carne es donde no se está pudiendo repercutir y donde se están registrando más pérdidas". añade.

La solución para la mayoría de los avicultores se basa en la contratación de seguros que les protejan ante el peligro que supone un contagio de estas características. "En el caso de aves ponedoras el 85% de las explotaciones ya están aseguradas pero en el caso de aves para carne son menos, solo el 20 o 25%", explica el representante del sector.

En total en España en lo que va de año, se han registrado ya seis brotes de gripe aviar en aves domésticas en España, y doce en aves silvestres. Según el Ministerio de Agricultura del Gobierno de España, el primer foco de IAAP H5N1 en aves domésticas se detectó en una explotación de pavos de Fuenterrebollo (Segovia) el pasado 18 de enero. El 2 de febrero hubo un segundo foco en Villarrasa (Huelva); dos focos más en Niebla (Huelva) e Íscar (Valladolid) el 9 de febrero; y dos el pasado 10 de febrero en explotaciones de pavos de engorde en Trigueros (Huelva) y Carmona (Sevilla).

Desde el departamento de Agricultura del Gobierno de Aragón afirman que por el momento no se ha registrado ningún caso de gripe aviar en ninguna granja de la comunidad y que las medidas que se están tomando son una cuestión de precaución ante la enfermedad.