El tema del transporte sanitario urgente en Aragón volvió a derivar este jueves en otro bronco e intenso debate en las Cortes de Aragón. A petición del PP, la consejera de Sanidad de la DGA, Sira Repollés, dio explicaciones sobre el nuevo contrato de ambulancias y lo hizo muy seria. Tajante en sus respuestas y «sin dar crédito», dijo, al «ruido» generado por el PP al afirmar que iba a haber un recorte.

«Solo con un ratito que le hubieran dedicado a leer la propuesta se habrían dado cuenta de que mejora y profesionaliza el servicio. Pero tienen especial fijación y una extraña habilidad para desviar la atención en un tema cuyo pliego no está publicado ni siquiera redactado», le dijo Repollés a la popular Ana Marín. «¿Cómo esto ha podido devenir en un recorte según ustedes? No doy crédito», decía la consejera.

Marín (PP), en su turno, afeó a Repollés que no agotara su tiempo de repuesta porque «le han sobrado cuatro minutos» y "no ha respondido a nada de lo que le he preguntado", le dijo.

Marín, en su turno, afeó a Repollés que no agotara su tiempo de repuesta porque «le han sobrado cuatro minutos», le dijo, y, en este sentido, criticó que «no ha respondido a nada de lo que le he preguntado».

Esto, entre otras cuestiones, arrancó el aplauso de una parte del público entre los que se encontraban alcaldes y representantes municipales del PP (invitado por el partido) provenientes de los municipios con transporte sanitario urgente.

El presidente de las Cortes, Javier Sada, tuvo que llamarles la atención por su aplauso al considerar que no era adecuado «dado que son representantes públicos».

"Desde el alba y hasta el ocaso"

La consejera, una vez más, zanjó la polémica sobre el posible recorte de ambulancias y dijo, mirando a la zona del público donde estaban estos alcaldes, que "ningún pueblo que tenga actualmente transporte sanitario lo va a perder", reiteró.

"No den pábulo a disparates, analicen la información porque por muchas elecciones que vengan no debemos perder el rigor. Decir que una comarca entera se queda sin ambulancia es un despropósito", criticó.

Repollés, además, aprovechó la intervención para recordar que los helicópteros se van a incorporar al transporte sanitario urgente en turno de noche. "Desde el alba y hasta el ocaso", dijo.

Un convenio colectivo con condiciones "inabarcables"

Por otro lado, la titular de Sanidad anunció que están esperando los informes de los servicios jurídicos de la Administración autonómica para «analizar las consecuencias del acuerdo» reciente por el convenio colectivo entre los sindicatos y la empresa Acciona, concesionaria del transporte sanitario urgente.

Este se firmó hace unos días y supuso el fin de la huelga del sector. Sin embargo, según la consejera las condiciones firmadas son «extraordinarias», «inabarcables y disparatadas» y «no queremos que este acuerdo suponga una hipoteca para el Gobierno de Aragón difícil de asumir», matizó.

El problema recae en que Acciona «está de salida» porque ha anunciado públicamente que no se presentará al nuevo contrato. «Carece de todo interés para negociar y los representantes de los trabajadores lo saben. Las mejoras son inabordable» y el impacto económico es muy difícil de gestionar», insistió Repollés. La DGA no forma parte de la negociación, pero sí acaba asumiendo sus consecuencias.