El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ha rescatado 25 perros en una finca de Ricla en estado de abandono. Los animales se encontraban en unas condiciones higiénicosanitarias inadecuadas, desnutridos, sin agua ni alimentos, sin microchip y sin vacunar.

En el interior de la finca también se localizaron además cuatro canes muertos e infinidad de huesos de animales esparcidos por todo el inmueble, así como en el interior de bidones metálicos. Los perros se han trasladado al centro de protección animal de Movera para su recuperación.

El día 13 de julio el alcalde de la localidad de Ricla puso en conocimiento de la Guardia Civil de La Almunia de Doña Godina que los servicios sociales de la comarca de Valdejalón habían atendido, el 11 de julio, a una mujer de avanzada edad que residía en Ricla, la cual solicitaba ayuda para ser atendida, puesto que ella no podía valerse por sí misma para sus cuidados, y que en la finca en la que vivía existían numerosos perros en malas condiciones.

Ante estos hechos, se dio aviso al Servicio de Protección de la Naturaleza, quienes tras el estudio de la información obtenida, comprobaron que el propietario de la finca se encontraba ingresado en un centro hospitalario, quedando su esposa sola en la vivienda. Para verificar el estado de los animales el día 15 de julio, el Seprona, junto con servicios veterinarios de la Oficina Comarcal Agroalimentaria de La Almunia de Doña Godina, el alcalde de Ricla y los servicios de recogida de animales de la Diputación Provincial de Zaragoza, se trasladaron a la finca donde se hallaban numerosos perros, en unas condiciones higiénicosanitarias inadecuadas, que se encontraban sueltos por la zona interior perimetrada de la parcela, donde había también bidones metálicos que contenían numerosos huesos de animales, además de existir huesos esparcidos por la finca, algunos de ellos calcinados.

Animales rescatados en la finca objeto de la inspección.

Animales muertos

En dicho terreno existía una nave, antiguamente utilizada como granja porcina, con numerosos compartimentos a los que se accedía desde un pasillo en el que había un perro fallecido. Otros tres canes muertos fueron localizados en otro habitáculo cubierto que se encontraba con numerosos enseres viejos y basura.

Tras verificar el estado en el que se hallaban los 25 perros que deambulaban por la finca, de diferentes razas, sexo y edad, se comprobó que además de no tener microchips ni estar vacunados, se encontraban en estado de abandono, sin agua ni alimentos, caquéxicos (extrema desnutrición), con multitud de parásitos y en unas condiciones higiénicosanitarias deplorables.

En ese momento a los animales se les proporcionó agua y comida por parte del Ayuntamiento de Ricla, siendo trasladados posteriormente al Centro de Protección Animal de Movera para su recuperación. Una vez acabadas las diligencias de estos hechos, que podrían constituir un presunto delito relativo a la protección de la flora y fauna, maltrato animal, por parte del propietario de la finca, fueron remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de La Almunia de doña Godina.