Entre las más de 50.000 personas que ayer asistían al Medusa Sunbeach Festival, estaba Irene Leonar, de 26 años y vecina de Alagón, que asistió al evento con otros dos amigos, Daniel Longo y Marta Pérez. La joven relata a EL PERIODICO DE ARAGÓN su experiencia como testigo del accidente que ha costado la vida de un joven de 22 años.

"Acabábamos de sentarnos a descansar y de repente empezó a levantarse un viento muy caliente, había mucha arena y parecía casi un huracán", explica la joven. En ese momento empezaron a ver las primeras estructuras precipitarse sobre la gente. "Veíamos gente ensangrentada atrapada debajo de trozos enormes de la estructura de los baños", explica la joven, que añade que ese fue el momento en el que supieron que tenían que salir.

"Todo el mundo echo a correr pero era difícil avanzar porque no se veía nada. Apenas podíamos abrir los ojos pero mi amigo llevaba gafas de sol y nos agarró para que no nos perdiéramos", relata la joven que asegura que fueron "momentos muy angustiantes". "No sabíamos muy bien que estaba pasando pero todo el mundo iba hacía la salida", cuenta. En su huida hacia el exterior del festival los jóvenes se fueron cruzando con ambulancias y coches de Policía Nacional. La joven relata además que mientras el viento provocaba los destrozos, la música no dejó de sonar en ningún momento.

"Nosotros no estábamos en el camping, teníamos que salir de allí e ir con el coche hasta Gandía", cuenta Leonar. Durante hora y media estuvieron esperando que les dieran el permiso para salir. "Todos queríamos salir y había mucha gente pero primero tenían que acceder las ambulancias", cuenta.

Por el momento, la joven asegura que el único contacto que han tenido con la organización del festival ha sido a través de las redes sociales donde se han colgado los comunicados que confirmaban la suspensión definitiva del resto del festival.