Sánchez garantiza su "compromiso" con los vecinos de Olba y San Agustín

La peor cara del incendio en su flanco izquierdo, el que afecta desde este pasado jueves a la vertiente turolense, se la llevaron cinco vecinos de la aldea La García de San Agustín, ya que sus viviendas fueron pasto de las llamas. Ahora el paraje es «gris» y «hostil» y el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, garantizó este lunes su «compromiso de entrar en la siempre difícil, compleja y urgente tarea de la recuperación de la zona». Así lo expresó en su visita al puesto de mando ubicado en la localidad castellonense de Barracas, donde lamentó las graves consecuencias que deja «la emergencia climática que está atravesando todo el mundo»; un factor que compartía también el alcalde de San Agustín, Daniel Riera, aunque el regidor no quiso dejar pasar la oportunidad de reivindicar ante Sánchez la necesidad de «trabajar y limpiar los montes».

Según explicó Riera, Sánchez le trasladó su compromiso de «no dejar en el olvido» a sus vecinos, especialmente, a los cinco «que se han encontrado sin casa». Además, el alcalde le insistió en la importancia de redactar «un plan de compensación» hacia estos lugareños con «algún tipo de recurso para seguir hacia delante». En paralelo, la postura de limpieza de los montes –recalcada por Riera y a la que no hizo alusión Sánchez durante su intervención– ya fue expresa durante estos últimos días por el presidente de Aragón, Javier Lambán, y la consejera de Presidencia, Mayte Pérez.

Mientras que Lambán lamentó «la acumulación de biomasa en los bosques por el abandono de la vida tradicional en el medio rural», Mayte Pérez defendió que «el monte hay que limpiarlo» por medio de «una colaboración público-privada».

"Vivimos en un polvorín"

Por su parte, los vecinos de Olba ya han tomado cartas en el asunto y ayer suscribieron un comunicado conjunto por el que reclaman zonas de protección para los habitantes del valle. «Vivimos en un polvorín y tenemos miedo de que un nuevo incendio se declare en cualquier momento y el viento esta vez no sople a nuestro favor», reivindican los vecinos, haciendo referencia al viento de componente noroeste que salvó el valle de Olba y que está arrasando el Alto Mijares, en Castellón.

En este sentido, los vecinos apuestan por establecer un perímetro de seguridad en cada una de las aldeas de los valles para evitar el drama de La García y dotarles de los medios de extinción necesarios para actuar rápidamente ante posibles conatos.

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En esta misma línea se pronunció Teruel Existe, denunciando que «la gestión forestal en España debe ser urgentemente revisada». «Más allá de la respuesta en la que se ha escudado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acerca del cambio climático, la pérdida de la ganadería extensiva, la falta de gestión y limpieza de los bosques y el abandono del territorio por la despoblación están haciendo que la situación sea insostenible», manifestaron.

Una «reflexión» que compartía anteayer la consejera de Presidencia de Aragón, Mayte Pérez, quien insistió en «mantener el monte limpio» con la colaboración público-privada ya que «desde las administraciones públicas no podemos alcanzar esas limpiezas».