URBANISMO

El cierre sobrevuela El Alcoraz al carecer de licencia municipal

Luis Felipe ordenó su clausura en mayo y se ha desestimado la suspensión cautelar al club

El ayuntamiento da tiempo para legalizar una situación que suma 5 años de retraso  

Panorámica del interior del estadio de El Alcoraz en Huesca

Panorámica del interior del estadio de El Alcoraz en Huesca / FEDERACIÓN ESPAÑOLA DE FÚTBOL

El estadio de El Alcoraz en Huesca, por extraño que pueda parecer, no tiene licencia de apertura y actividad. Una situación irregular que provocó ya en mayo que el ayuntamiento de la capital altoaragonesa ordenara el cese de su actividad y su cierre inmediato hasta que legalizara su situación urbanística. Un mandato del exalcalde socialista Luis Felipe a doce días de las elecciones que deja ahora la patata caliente en manos de su sucesora, Lorena Orduna, del PP, obligada a legalizar la situación del campo de fútbol, de titularidad privada, con una tramitación exprés o ejecutar el mandato de clausura que data del 17 de mayo, que fue cuando se publicó el decreto de Alcaldía firmado por el anterior primer edil el día anterior y del que la Sociedad Deportiva Huesca tiene constancia desde el día siguiente, 18 de mayo.

Desde entonces, casi seis meses después, el estadio se encuentra en situación de ilegalidad, por no tener la licencia de funcionamiento en un texto refundido para el que antes necesita obtener la licencia ambiental. Un permiso que solicitó el club, por primera vez desde entonces, el pasado 6 de octubre, en un recurso presentado por el gerente de la entidad, José Luis Ortas, en el que además solicitaba la suspensión cautelar del decreto de Luis Felipe por dos vías, un recurso extraordinario de reposición y otro de revisión que ayer mismo se desestimaban con otro decreto municipal.

La respuesta de los servicios de Urbanismo del Ayuntamiento de Huesca son tan contundentes como el propio decreto de Luis Felipe de mayo. En aquel momento, en mayo, el alcalde dictaba expresamente que se debía «cesar la actividad» en El Alcoraz y le daba un mes de plazo para solicitar licencia ambiental y presentar un proyecto técnico. Pero no solo no lo aportó, tampoco recurrió en vía administrativa este decreto ni interpuso un contencioso en los tribunales, con lo que, transcurridos los plazos que marca la ley, devino en una sentencia «firme» para la clausura del estadio que había que ejecutar por parte del consistorio y cumplir por parte de la entidad.

EL CLUB OPTA POR MENTIR

Pero sorprendentemente, la SD Huesca, en su afán por desmentir públicamente la información adelantada por EL PERIÓDICO DE ARAGÓN, llegó a decir que «la información vertida por el citado medio es total y absolutamente contraria a la verdad, no existiendo ningún decreto en el que se ordene el cierre inmediato del estadio El Alcoraz». No solo lo demuestra la documentación oficial que se le hizo llegar el 18 de mayo al club, a la que tuvo acceso este diario, también desmintió a la entidad el propio ayuntamiento en un comunicado oficial posterior en el que admitía la información publicada, la existencia del decreto de Luis Felipe y una situación irregular que le conminaba a regularizar cuanto antes. Aunque el consistorio hacía también una llamada a la calma para asegurar que no está previsto un cierre inminente «de momento» pero que es completamente cierto que Luis Felipe lo ordenó y nunca se llegó a cumplir y que podría hacerse cumpliendo con la ley porque el estadio «no cuenta con licencia de actividad» y que la documentación «no está completa». Así se podría resumir la situación de El Alcoraz: se podría cerrar hoy mismo porque no tiene licencia municipal y se ordenó su clausura pero nadie lo ha ejecutado. Todavía.

Porque este polvorín estalla cuando se hace público lo que hasta ahora solo conocían el club y el ayuntamiento. De hecho la propia alcaldesa se enteró con posterioridad a su toma de posesión, ya que Luis Felipe olvidó comunicarle este importante decreto en el traspaso de poderes, y según ha podido saber este diario, la decisión del socialista no fue una orden espontánea o improvisada, ya que por esta situación irregular lleva recibiendo requerimientos del consistorio desde hace cinco años.

Pero la situación es grave y así se hace constar en el decreto emitido ayer por el Ayuntamiento de Huesca en el que daba respuesta a las cautelares pedidas por el club ante la situación irregular e ilegal de su estadio.

Los técnicos municipales explican que la orden de cese de actividad es «firme» porque el decreto de Alcaldía «fue notificado el 18 de mayo de 2023 a la Sociedad Deportiva Huesca, sin que contra dicha resolución se interpusiera ni recurso administrativo alguno, ni contencioso administrativo en los plazos pertinentes». Que su petición de suspensión cautelar es inadmitida ahora por varios motivos que responden a una cadena de errores de difícil explicación. Por ejemplo, se interpuso un recurso extraordinario de reposición en mayo que ahora es «extemporáneo» y en su día ya era «inexistente». Explican que contra decisiones como la del decreto de Luis Felipe «solo caben los recursos de alzada y el potestativo de reposición» según la ley 39/2015 del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas. No existe esa fórmula a la que se acogió para frenar una orden de este tipo.

Debió presentar un recurso extraordinario de revisión, que es el solicitado ahora y que también inadmiten porque «no está fundado en ninguna de las causas que prevé el artículo 125.1 de la Ley 39/2015» y además en ese escrito del club «ni tan siquiera hace mención a alguna de ellas».

Con esta inadmisión queda claro que con el decreto de Luis Felipe el estadio ya se debería haber cerrado pero nadie lo ha ejecutado. Y, mientras, en El Alcoraz, solo de la competición liguera, ya se jugó un encuentro oficial la temporada pasada, frente al Eibar, y siete en la actual. Y también se constata que si no se ha clausurado quizá sea por no infringirle un daño «de imposible o difícil reparación» que puede ser letal para la subsistencia del club.

POSIBLE DESAPARICIÓN

Lo dice la propia SD Huesca en el escrito de Ortas remitido en octubre: «El estadio de El Alcoraz reúne todas las condiciones y requisitos establecidos en el Reglamento General de la Liga de Fútbol Profesional, estando calificadas de interés general las competiciones de la Liga, tanto en Primera como en Segunda; el cierre del estadio generaría la imposibilidad de que los aficionados asistieran al estadio y la sanción de tres puntos por los organismos correspondientes; el cierre continuado provocaría la expulsión inmediata de la competición y consiguientemente la desaparición de la SD Huesca SAD y unas pérdidas cercanas a los 7 millones de euros; afectaría a más de 200 trabajadores indirectos además de a un número de trabajadores que realiza sus funciones los días de partido».

El escenario que se le presentaría al club sería catastrófico, lo define él mismo, que llega a afirmar que «todo ello llevaría al cierre del estadio y a la presentación inmediata de un concurso de liquidación de la misma eliminando cualquier atisbo de que la ciudad de Huesca cuente con un equipo profesional».

Pero la respuesta del ayuntamiento no es tibia, todo lo contrario. La respuesta del decreto de ayer llega a afirmar que «en primer lugar hay que decir que la situación creada se debe esencialmente a la inactividad de la SD Huesca SAD y es ella la responsable de no haber presentado en su momento la documentación requerida». Sobre los perjuicios a los que alude la entidad, el consistorio le responde que ese daño económico no está justificado ni acreditado aunque admite que el cierre sí tendría consecuencias «muy importantes». Pero añade que «la suspensión de la ejecución del acto (se refiere al cierre ordenado) podría afectar de manera muy grave al interés público», por esa obligación del ayuntamiento de vigilar el cumplimiento de la normativa y velar por la seguridad y bienestar de los ciudadanos». Por tanto, concluye que el perjuicio en cuanto a la seguridad de sus miles de espectadores es mayor que el daño económico a la entidad, dado que «precisamente la licencia ambiental exigida es la que comprueba las medidas de extinción de incendios, evacuación de personas, salidas de emergencia, etc».

Por todo ello, el teniente de alcalde de Urbanismo, Iván Rodríguez, firma esta resolución actual en la que se inadmiten los recursos presentados por la SD Huesca y se da traslado a los servicios municipales para iniciar el expediente para la obtención de licencia ambiental del estadio. Pero ahora mismo la situación del campo sigue siendo ilegal y con una orden de cierre que es firme. En este caso, la defensa de la SD Huesca se basa todo en una declaración responsable que es la herramienta utilizada para iniciar la actividad sin obtener esa licencia obligatoria pero que la presentó «sin adjuntar informe técnico al respecto».