EDUCACIÓN SEXUAL

La lucha contra el VIH: «Muchos jóvenes no saben ni colocarse un preservativo»

Su trabajo consiste en informar sobre el VIH y otras enfermedades de transmisión sexual en los institutos de Zaragoza

José Ángel en una de las sedes de Omsida, en Zaragoza.

José Ángel en una de las sedes de Omsida, en Zaragoza. / Omsida

El Periódico de Aragón

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José Ángel Gilabert es educador en Omsida desde 2017. Su trabajo consiste en informar sobre el VIH y otras enfermedades de transmisión sexual en los institutos de Zaragoza, donde se encarga de ayudar a «concienciar a los adolescentes sobre este tipo de infecciones», señala.En su paso por las aulas ha observado que el perfíl entre los jóvenes es «muy variado». «Depende mucho de la edad, el país de origen y su situación social», explica, e incide en que «los hay que núnca han oido hablar de la enfermedad y, también, los que la conocen pero no saben sobre nada sobre el estígma social que hay detrás de la infección».

Porque, a pesar de que las nuevas generaciones «tienen una visión más abierta del sexo», en general, «los jóvenes conocen lo que es el VIH, pero no como se transmite», explica Gilabert. Para conocer las dudas de los alumnos, el educador reparte papeles en blanco al inicio de sus sesiones. «Cada uno de ellos escribe todas sus dudas sobre el VIH, las relaciones sexuales o cualquier tipo de ETS. Al final de la clase las leemos de forma anónima para resolver todas las dudas que tengan», explica.

El amplio abanico de dudas entre los adolescentes va desde el desconocimiento de los posibles tratamientos de la enfermedad, «como la profilaxis post exposición al VIH, un tratamiento de emergencia ante una práctica con riesgo de contagio que evita la infección», o, incluso, «no saber colocar un preservativo de forma adecuada».

La sexualidad se ha desestigmatizado en los últimos años, aunque «todavía queda mucho trabajo por hacer», asegura Gilabert. Y, a pesar del trabajo que realizan desde asociaciones como Omsida, Fogaral o Accem,«debería haber más educación sexual en los colegios, sobre todo con el aumento de diagnósticos de ETS en los jóvenes», expresa. Aplicaciones como Tinder o Grinder han sido las grandes señaladas ante el aumento de la transmisión de infecciones sexuales. Sin embargo, para Gilabert, el verdadero enemigo no son las ‘apps’ de citas, sino «en el aumento de parejas sexuales sin tomar ningún tipo de precaución». E incluso en el caso de que solo se mantengan relaciones íntimas con una misma persona, «en el momento en el que se toman medidas diferentes al preservativo, ambos deberían hacerse una prueba de VIH, porque puedes ser asintomático aunque hayan pasado años», concreta.