Más de 20 años de pasión por el coleccionismo

Con el comienzo de la Semana Santa llega el sonido de los tambores, el olor a incienso y la presencia cofrade en las calles. Una conmemoración a los últimos días del Señor que se realiza en Zaragoza desde 1937, cuando nació la primera cofradía en la capital aragonesa. Son más de 85 años de historia en torno a una celebración que esconde muchos detalles desconocidos para la ciudadanía. A profundizar en ella se dedica, desde hace mucho tiempo, Javier Velázquez, coleccionista y miembro de la Asociación para el Estudio de la Semana Santa.

«Reúno álbumes con fotografías, grabados, programas, guías, documentos... En realidad, recopilo todo lo que tiene que ver con esta celebración en Zaragoza. Son, sobre todo, cosas en papel. En total tengo más de 1.000 objetos», expresa Velázquez. Tras muchos años dedicándose a ello como hobby, considera que el recuerdo más especial que tiene es «la fotografía más antigua de la Semana Santa zaragozana, que fue tomada en 1870 y que es muy pequeña, tamaño carnet». En ella se retrata la imagen del Cristo de la Cama y la Virgen de los Dolores. Sin embargo, lamenta que solo ha podido conseguir la primera parte: «Nunca llegué a encontrar la de la Virgen de los Dolores. Lo otro lo descubrí porque un fotógrafo tomó la instantánea y la empezó a vender a modo de estampita, y para dar a conocer esta oferta lo publicó en la prensa».

«El objetivo no es hacer la colección para tenerla en mi casa, sino intentar que la gente pueda acceder a ella y descubrir cosas curiosas de la esta celebración en Zaragoza», especifica Velázquez. Para ello, y con ayuda de la asociación, recurre a la prensa, a las exposiciones, a los documentos... «Voy a librerías que recogen información sobre el tema y les pido que, si en un futuro encuentran algo, me avisen», relata. Los artículos recopilados, añade Velázquez, también llevan un cuidado: «Las medallas y grabados, los enmarco. También tengo varios álbumes con la serigrafía de ‘Semana Santa de Zaragoza’. Lo que es en papel, trato de digitalizarlo para tenerlo todo documentado y guardado», explica.

En cuanto a las fotografías, cuenta que acude a tiendas especializadas en las que comprar cajas dedicadas a la conservación de imagen: «Evitan que se genere humedad. Son muy delicadas y es difícil preservarlas».

Esta pasión de Javier Velázquez nace desde muy pequeño. «Como fanático de la Semana Santa, recopilaba artículos de periódicos y me guardaba programas cofrades», narra. «En mi familia no éramos de ninguna cofradía, pero éramos semanasanteros. Nos gustaba salir a la calle y seguir los pasos», añade.

Según expresa, todo ello le llevó a hacer coleccionismo de manera más profesional hace veinte años: «Fue con el boom de internet. En el momento en el que nacieron todas las páginas sobre esto, en ellas empecé a encontrar cosas muy curiosas», explica.

A lo largo de los años, la Semana Santa de Zaragoza se ha ido popularizando y con ello la cantidad de material que Velázquez ha sido capaz de encontrar. De hecho, cuenta que lo ha notado con sus proveedores: «Me dicen que cada vez hay más gente interesada en artículos relacionados con este tema. Antes éramos 2 o 3 personas, pero el número ha crecido. Si algo es curioso, te lo quitan rápido», concluye.

Suscríbete para seguir leyendo