El número de Viviendas de Uso Turístico se duplica en Zaragoza en los últimos cinco años

Irse de viaje y alojarse en un hotel ya no es lo más habitual. La proliferación de plataformas como AirBnB y el crecimiento del número de Viviendas de Uso Turístico (VUT) ha hecho que esta opción se convierta en una de las preferentes tanto para los profesionales que se desplazan por trabajo como para los turistas. En Zaragoza, según los últimos datos disponibles, de este mismo mes de mayo, hay 663 pisos con este tipo de licencia. Hace cinco años solo eran 269. El crecimiento ha sido de un 146,5%, por lo que se ha más que duplicado la oferta. 

No obstante, a pesar de lo llamativo de estos datos, el aumento de este tipo de viviendas «ha sido ordenado» y se ha producido «con algo de retraso» con respecto a otras grandes ciudades españolas. Pero eso ha resultado ser «positivo, puesto que ha dado tiempo a regular mejor el sector», lo que ha supuesto «una mayor calidad» de los pisos que se ofrecen.

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Lo explica Jorge Fernández, el CEO de Alogest, una empresa que se dedica a gestionar Viviendas de Uso Turístico, la mayor parte de terceras personas. «Nosotros nos encargamos de todo, desde la comunicación con los huéspedes hasta la limpieza y el mantenimiento de los apartamentos. Pero también ofrecemos asesoramiento a personas que quieren obtener la licencia de VUT. Y es importante tener claro que no todos los pisos valen y que es una modalidad que tampoco vale para todo el mundo», dice. Aunque reconoce que sí, que el interés de los propietarios por este tipo de alquiler y la demanda de la información ha crecido sustancialmente.

El año pasado se actualizó la normativa autonómica para las VUT y se detallaron características que estos pisos deben cumplir: metros cuadrados por huésped, equipamiento de la cocina y toda una serie de condiciones de habitabilidad y calidad de las construcciones. 

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Para obtener una licencia de VUT lo primero que hay que saber es si la comunidad de propietarios en la que esté el piso no ha prohibido el establecimiento de pisos turísticos. Después se debe contar con un certificado de idoneidad y un plano acotado del piso que dé cuenta del estado de la vivienda de que esta cumple con todos los requisitos. Un inspector se encarga de comprobar que todo está en regla y tras ello hay que presentar una declaración responsable.

Turismo desestacionalizado

Dos son las claves que motivan el aumento de las Viviendas de Uso Turístico en Zaragoza. La primera, opina Fernández, es el crecimiento del turismo en la ciudad. «Antes siempre se llenaba en Pilares y Semana Santa, pero el resto del año era flojo en comparación. Ahora el turismo se está desestacionalizando y hay visitantes todos los meses del año», cuenta. 

Y esto incide directamente en el segundo motivo que hay detrás de la explosión de licencias de VUT: la rentabilidad de este tipo de alquiler, que no siempre es mayor que la del alquiler tradicional. 

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«Depende de la zona. No es lo mismo el Casco que La Romareda. En esta zona sigue siendo mucho mejor el alquiler tradicional de larga estancia, pero en el centro es más rentable una VUT, aunque también existen muchas diferencias dependiendo de la calle y del tamaño del piso. Pero si las condiciones son buenas, en el Casco la rentabilidad puede duplicar o triplicar la del alquiler tradicional», asegura el CEO de Alogest. 

No obstante, explica Fernández, «hay que saber que el nivel de ingresos que te genera una VUT fluctúa». «Hay quien prefiere que le llegue un pago regular todos los meses y olvidarse. Porque un piso turístico te puede generar 3.000 euros un mes pero luego en enero o febrero generar 300», cuenta. 

Asimismo, los ingresos obtenidos por un alquiler tradicional puede deducirse el 50% en la declaración de la renta, una cuestión que también hay que tener en cuenta a la hora de hablar de rentabilidad. Por otro lado, el arrendamiento de las VUT, por el momento, está exento de IVA. 

Según un estudio del portal inmobiliario Alquiler Seguro, en Zaragoza el alquiler turístico es el que permite una mayor rentabilidad, aunque en comparación con otras grandes ciudades españolas, el margen se reduce a un 3% por encima de la alternativa de arrendamiento de vivienda habitual.

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La convivencia con los vecinos es otro de los factores que deben tenerse en cuenta. Fernández asegura que nunca han tenido problemas entre los huéspedes de los pisos que gestionan y los propietarios de viviendas del mismo bloque. «En Zaragoza el perfil de turista que viene es muy familiar. Es gente que lo que busca es conocer la ciudad, por lo que no pasan mucho tiempo en casa. Y entre semana el cliente de una VUT suele ser un profesional que viaja por trabajo y que tampoco causa molestias», asegura Fernández.