¿Por qué no deberías utilizar el autocobro en los supermercados?

El avance de las nuevas tecnologías y el auge de la generación del 'Ya' influencian el trascurso de la vida cotidiana. Ya no quedan muchos ámbitos sin digitalizar y modernizar. Es algo que está a la vista de todos y que genera en más de una ocasión disparidad de opiniones.

Incluso se está dando el caso de que las máquinas sustituyan al factor humano, restando puestos de trabajo disponibles. Esto ya es una realidad en comercios como tiendas de ropa y supermercados, donde es cada vez más habitual toparse con las cajas de autocobro: ya no se necesitan tantos cajeros y cajeras para cobrar los artículos que quieran llevarse los clientes, sino que ellos mismos pueden escanear los códigos de barras y proceder al pago sin la atención del personal.

Las principales finalidades de estos cambios son acortar el tiempo de espera de compra y ahorrar en gastos. Esta decisión no ha recibido un apoyo unánime de la ciudadanía y así lo ha demostrado una usuaria de la red social TikTok.

Los 'peros' del autocobro en supermercados

Lindsey Granados es una abogada estadounidense que, desde su cuenta @ldbglawyer, se dedica a difundir información acerca de temas legales en torno al mal funcionamiento de las tecnologías en el comercio. Un año atrás se hizo eco de lo que para ella suponía la tendencia de convertir el personal cajero en una máquina casi autosuficiente.

En esta publicación, aconseja a sus seguidores evitar el uso de estos aparatos y estar muy atentos porque, según sus palabras, podrían conllevar algunos riesgos. Su vídeo roza las 85.000 reproducciones y tiene comentarios de todo tipo.

"Esas máquinas son defectuosas en muchos sentidos y no son sensibles a las particularidades y, lamentablemente, no escanean elementos de vez en cuando", asegura Granados. Pero sobre todo ha querido destacar los peligros que ha percibido de dichos dispositivos. Uno de ellos son acusaciones erróneas e injustificadas de robos y, para demostrarlo, la experta ha puesto ejemplos de consumidores que han atravesado problemas legales por estas causas.

Sin embargo, no sólo los clientes son los que tienen posibilidades de salir mal parados, sino que también los supermercados o tiendas donde estén instaladas estas cajas pueden sufrir consecuencias. Aunque no es lo habitual, hay quien se aprovecha de los fallos del sistema de autocobro para proceder al hurto de productos costosos.

Por tanto, @ldbglawyer defiende que lo mejor es ser atendido por el personal y, si se siguen instalando estos artefactos, realizar un seguimiento minucioso para evitar robos y problemas mayores. Además, recuerda que las nuevas tecnologías pueden ser tanto amigas como enemigas si no se tienen en cuenta los riesgos asociados.