El Casademont Zaragoza ya está en Rusia, en la ciudad de Saratov, para comenzar su viaje por lo desconocido. Desde este miércoles empieza a explorar una nueva competición, la segunda organizada por la FIBA, la cuarta del escalafón continental, con un formato ligeramente distinto a las que ha disputado hasta ahora. El club aragonés afronta su debut en la Europe Cup y se convierte en el primer español en el torneo, después de no haber obtenido plaza para la Champions, donde ha competido los dos últimos años.

Tras los torneos clasificatorios disputados en las últimas semanas ya están preparados los 32 equipos que toman la salida desde este mismo martes buscando una final que se disputará también en formato eliminatoria. En esta primera fase hay ocho grupos de cuatro equipos. En cada uno de ellos los dos primeros avanzarán de ronda, a una nueva etapa también de grupos (a partir del 8 de diciembre), desde la que ya se accederá a las eliminatorias. Cuartos, semifinales y final se disputarán a ida y vuelta.

Junto al Casademont Zaragoza hay ocho debutantes más en una competición que se disputa desde 2015 y que hasta ahora han ganado el Fraport Skyliners germano, el Nanterre 92 francés, el Umana Reyer Venezia y el Dinamo Sassari, ambos italianos, y, en la última edición (en 2020 no hubo campeón), el Ironi Ness Ziona israelí. Precisamente uno de los rivales del conjunto aragonés en el grupo D, el Hapoel Gilboa Halil israelí, es otro de los novatos en la competición, en la que también se estrenan el Hakro Merlins Crailsheim germano, el Hapoel Eilat israelí, el Ionikos y el Peristeri Vitabiotics, ambos griegos, el London Lions británico, el Opava checo y el Trefl Sopot polaco.

A la FIBA Europe Cup acceden clubs que no han obtenido plaza para otra competición europea o que han caído de la fase previa de la Champions. De hecho, 12 de los 32 conjuntos que empiezan a jugar este martes proceden de esas eliminatorias de la BCL. El Casademont Zaragoza quedó encuadrado en el grupo D junto a rivales ilustres, de los más conocidos del torneo, con más pedigrí continental. Además, va a disputar los primeros tres partidos fuera de casa, este miércoles en Saratov, el próximo en Israel y, el siguiente, en casa del Pallacanestro Reggiana. Después recibirá a todos en el mismo orden en el Príncipe Felipe.

Se estrena con el viaje más complicado de todos, casi 4.800 kilómetros hasta Saratov, a unos 858 kilómetros al sureste de Moscú. El Avtodor, fundado en 1960, ha sido subcampeón de Liga cuatro veces y semifinalista de la Eurocup en la temporada 97-98. La temporada pasada ganó 10 partidos y perdió 14. Juega en el Kristall Arena, con capacidad para 5.500 espectadores. Ha disputado dos partidos de la VTB League, ganando fuera al Kalev (93-97) y cayendo este fin de semana en casa frente al Lokomotiv (95-108). Entre sus filas, viejos conocidos como Kenny Chery, Philip Scrubb o Zeljko Sakic, rival hace dos años con el Lietkabelis.

Su siguiente visita será a Israel, donde no ha viajado hasta ahora. El Hapoel Gilboa Galil fue finalista de la competición hebrea el curso pasado cayendo por 2-1 contra el Maccabi de Tel Aviv, después de haber sido tercero en la fase regular con un balance de 19 victorias y 10 derrotas. Este curso ha comenzado con dos derrotas, en cuartos de la Copa frente al Hapoel Jerusalén (60-73) y en Liga contra el Be’er Sheva (83-69).

El viaje más sencillo será a Reggio Emilia, en el norte de Italia. El Pallacanestro Reggiana, que la temporada pasada fue undécimo en la Lega con un balance de 10 victorias y 18 derrotas, ha comenzado la presente con dos victorias y una derrota en las dos primeras jornadas, aunque es el segundo anotador de la competición con 92 puntos de media.