Un partido marcado en rojo

Porfirio Fisac le ha dado la máxima importancia a este partido y no es para menos. El Casademont Zaragoza visita por primera vez en su historia al recién ascendido Zunder Palencia, colista de la Liga Endesa, ante el que debe buscar la victoria para marcar más distancias con los puestos de descenso, que le siguen acechando demasiado cerca. Así que el duelo está marcado en rojo y el equipo tendrá que demostrarlo este domingo desde las 12.30 horas en el Pabellón Municipal de Deportes de la ciudad castellanoleonesa.

Este equipo es absolutamente impredecible. Ha ganado cinco partidos de Liga de los catorce que ha disputado, todos ellos en casa, tres contra rivales con mejores plantillas y en un estado extraordinario de forma como fueron el Unicaja, el UCAM Murcia y, su última víctima, el Barça. Tiene muchas asignaturas pendientes, entre ellas ganar fuera de casa y hacerlo contra rivales directos porque ha perdido sus duelos contra el Granada, el Breogán, el Obradoiro o el Manresa. Demasiadas oportunidades pasadas que han condenado al conjunto aragonés a comenzar sufriendo otra temporada. Ahora ha vuelto a enlazar dos triunfos consecutivos en la competición doméstica y debería intentar aprovechar esta inercia para seguir sumando.

Fisac: «Nos estamos jugando no descender»

Porque, además, puede recuperar efectivos. Emir Sulejmanovic seguirá siendo baja, pero Fisac quizá pueda contar con Santi Yusta tras su esguince de tobillo. Una recuperación importante porque se trata de una pieza clave del equipo que, además, dará más amplitud a la rotación exterior, más corta desde la salida de Cinciarini. Y es que el Casademont continúa con un solo base puro en su roster, pero no le está yendo nada mal así porque Bell-Haynes, una vez superados sus problemas en el hombro, está siendo el líder indiscutible del equipo.

Enfrente habrá novedades seguras. La principal, en el banquillo, porque se estrena un viejo conocido del Casademont Zaragoza, Luis Guil, recién llegado esta semana para reemplazar al destituido Marco Justo. Este simple cambio puede suponer una motivación extra para unos jugadores que ahora pueden ver modificado su rol dentro del equipo. Es el caso de Yannick Franke, a quien Justo había dejado fuera por decisión técnica y que ya volvió a ser importante en el partido adelantado del pasado martes en Vitoria. Allí cayó de nuevo el conjunto palentino, pero peleando y yendo por delante hasta el último cuarto.

Ahora, todos «parten de cero», según Guil, por lo que querrán ganarse sus minutos. Vitor Benite, que no jugó en Vitoria por una lumbalgia, es el máximo anotador del equipo con 11,7 puntos, seguido muy de cerca por los 11,5 de Franke. Pasecniks, con 9,9 puntos y 4,7 rebotes, es el mejor valorado del equipo con 12,4 de promedio y el único que supera los diez créditos en este apartado. En las filas moradas juega un aragonés, el pívot Chema González, considerado por el club como clave en el histórico ascenso que consiguió el curso pasado a la máxima categoría.