CASADEMONT ZARAGOZA

La crónica del Casademont Zaragoza-Cukurova: el sueño continúa vivo, habrá tercer partido (57-56)

El Casademont Zaragoza supera al Cukurova en otra noche mágica en el Príncipe Felipe y se jugará el pase a la Final Four el próximo miércoles en Mersin

Pointer, Holesinska y Gulbe celebran la victoria frente al Cukurova.

Pointer, Holesinska y Gulbe celebran la victoria frente al Cukurova. / JAIME GALINDO

Esto es Zaragoza. Esto es el Casademont. Un equipo que da hasta el último gramo de su esfuerzo, que cree, pelea, quiere y sueña hasta el final y una afición que disfruta a lo grande con sus jugadoras. En otro partidazo, en otra exhibición de rasmia y de juego, en otra noche mágica en el Príncipe Felipe, el Casademont Zaragoza superó al subcampeón, al Cukurova, por 57-56 y continúa en la Euroliga. Habrá un tercer y definitivo partido el próximo miércoles a las 17.30 en Mersin. El que gane jugará la Final Four.

Poco más se puede decir, poco más queda por decir de este grupo de jugadoras que están haciendo añicos todos los pronósticos en el año de su debut en la máxima competición continental. Nadie contaba con ellas en un grupo con los campeones de Turquía, España, Francia e Italia y ahora están a un partido, sí, a 40 minutos, de la final. No será nada fácil ante la calidad del rival pero este Casademont no tiene límites, no deja de sorprender. Hace de cada partido una fiesta y este miércoles no fue una excepción, Zaragoza volvió a vibrar, a ser feliz con su equipo.

Al Casademont le costó anotar sus primeros puntos pero no concedió segundas oportunidades en el rebote, que era uno de sus objetivos, lo que le permitió ponerse por delante en un inicio de pocos puntos (5-4, min. 5). El equipo aragonés estaba bien atrás pero con solo dos canastas anotadas en doce intentos era cuestión de tiempo que apareciera la calidad del Cukurova para llevar el partido a un primer momento de peligro ya en el primer cuarto con el 5-11 que obligó a Cantero a pedir un tiempo muerto a los siete minutos de juego. El tiempo no cambió las cosas y el marcador llegó a un 5-13 aún más amenazante.

Entonces llegó la técnica a Mabrey por protestar una falta en ataque, que provocó el enfado del técnico y que la talentosa jugadora estadounidense se encarara con la grada sin que ello conllevara ningún castigo. Eso encendió todavía más el partido a la grada, aunque no mejoró de manera inmediata el acierto de las locales, que seguía muy lejos del necesario para llevarse el partido (9-15 al final del primer cuarto).

Un triple de Vega y la aparición de Geldof dieron otro aire al equipo y el Casademont se acercó a tres pero entre la calidad de Carter y los dos triples seguidos del Cukurova no había forma de darle la vuelta, aunque la grada creía y animaba a las suyas al grito de «sí, se puede». Los ocho puntos de Vega y los rebotes, recuperaciones y puntos de una Geldof imperial pusieron el 22-23 con un parcial de 8-0 y provocaron el primer tiempo del Cukurova a los 14 minutos. Eso no frenó al Casademont, que se puso por primera vez por delante con un triple de Fiebich (25-23).

Poco acierto

El Casademont estaba bien en muchos aspectos y el Cukurova no se terminaba de encontrar cómodo, como demostraba el hecho de que el equipo se mantenía en partido (27-30 al descanso) a pesar del escaso acierto ofensivo. Solo cuatro canastas de dos en veinte minutos eran un bagaje demasiado pobre, salvado por los cinco triples y el buen trabajo colectivo en el resto de facetas.

 Lo tuvo al inicio de un tercer cuarto que comenzó con un 7-0 que no solo le dio la vuelta al marcador (34-30) sino también alas al equipo y a una grada volcada con las suyas. Porque siguió tras el tiempo muerto con otro triple de la capitana, con un clínic defensivo de Fiebich, con una Diallo imparable, para dejar al Cukurova sin anotar durante seis minutos y endosarle un 14-0 (43-30) de parcial al subcampeón de Europa en uno de esos momentos mágicos que regala este equipo con tanta frecuencia. Una bendita locura que explica por qué casi 6.000 personas pagaron para ver a un grupo de jugadoras, porque son capaces de emocionarles y levantarles del asiento cada día. 

El Cukurova recortó con un parcial de 0-9 (43-39) aprovechando que volvió la falta de acierto local, apretando todo de nuevo para el último parcial (45-39). El partido era de alto voltaje y estaba en manos del Casademont, que seguía dejándose la piel en cada defensa y encontrando el acierto más por fuera que por dentro. Era un auténtico partidazo, con el Cukurova enseñando las garras cada vez que podía y dejando todo en un puño para el final (55-53 a dos minutos y medio y 57-56 a 1.11 del final). Tanto que el Cukurova tuvo un último lanzamiento sobre la bocina para llevarse la victoria pero lo repelió el aro y estalló de júbilo el pabellón, que despidió a las suyas al grito de «sí, se puede».

FICHA TÉCNICA

Casademont Zaragoza: Mariona Ortiz (4), Tanaya Atkinson, Leo Fiebich (9), Aleksa Gulbe (6) y Christelle Diallo (14) –equipo inicial–, Gervasini, Holesinska (6), Pointer (1), Vega Gimeno (11), Urdiain, Hermosa y Geldof (6).

Cukurova Mersin: Marina Mabrey (9), Olivia Epoupa (1), María Araújo, Stephanie Mavunga (15), Kahleah Copper (17) –equipo inicial–, Yalcin, Kiss (3), Cornelius (7), Yaya, Atas, Hollingsworth (4) y Avci.

Parciales: 9-15, 18-15, 18-9 y 

Árbitros: Marziali (Ita), Maret (Fra) y Perlic (Cro).

Eliminadas: No hubo

Incidencias: 5.626 espectadores en el Príncipe Felipe. En el palco estuvo el presidente de Aragón, Jorge Azcón.