Manolo Jiménez ha quedado desligado definitivamente del Real Zaragoza tras el acuerdo alcanzado esta mañana entre ambas partes. El técnico andaluz, que tenía todavía otra temporada más de contrato y otra opcional, ha firmado este martes el finiquito después de que el club aragonés anunciase el lunes de la semana pasada un principio de acuerdo para su desvinculación.

El Real Zaragoza ha emitido un comunicado en el que agradece la profesionalidad y la dedicación del sevillano en su etapa como entrenador zaragocista así como las facilidades ofrecidas para alcanzar un acuerdo satisfactorio para todas las partes. Asimismo, el club le desea toda clase de éxitos personales y profesionales en el futuro.

Manolo Jiménez se ha despedido del zaragocismo mediante una carta publicada a través de la página web en la que destaca su pesar por no haber cumplido el objetivo deportivo marcado en esta última temporada, ya que el andaluz se marcha dejando al Real Zaragoza en la división de plata del fútbol español.

Carta de despedida

"Estimados amigos:

Una vez hecha oficial mi salida del Real Zaragoza, no quiero hacerlo sin despedirme de todos los aficionados, jugadores, prensa, trabajadores, ejecutivos y directivos del Club.

Si pienso en los sentimientos que este club ha despertado en mí, en el terreno profesional y en el personal, me parece imposible que todos ellos se hayan generado en tan solo un año y medio. Solo puedo sentir orgullo por haber podido formar parte de este Club.

Me voy con el pesar de no haber cumplido el objetivo deportivo marcado en esta última temporada. Aunque como he manifestado en numerosas ocasiones, creo que el fútbol no ha sido justo con nosotros este año, no hemos tenido ese porcentaje de suerte que siempre es necesaria en todos los ámbitos de la vida. No quiero por ello eludir la responsabilidad y es claro que cuando sucede algo así, es porque quienes teníamos la responsabilidad de competir cada semana, no hemos hecho el trabajo como deberíamos haberlo hecho y el entrenador el primero como máximo responsable.

Con todo ello, si hay algo que puedo asegurar, es haber puesto siempre el máximo por mi parte, todas las horas del día y toda mi capacidad al servicio de este Club. No conozco otro modo de hacer mi trabajo, que no sea el de dar la vida por defender aquello en lo que uno cree. Tuve la inmensa fortuna de poder vivir una experiencia maravillosa, como fue la salvación del año anterior, algo que siempre me llevaré conmigo, como una de las mejores experiencias vividas en mis años de profesional en el futbol.

Todo lo vivido en este tiempo, lo positivo y lo menos positivo, no hubiera sido posible sin el apoyo de todos los jugadores que han formado parte del Club mientras yo he sido entrenador y a todos ellos quiero agradecer su entrega y profesionalidad en este tiempo juntos. Asimismo, nada de esto tendría ningún sentido, sin una afición como la que tiene este Club, que nos ha dado mucho más de lo que hemos podido devolverles al final, pero que siempre han estado con nosotros a muerte y que nos han hecho sentir su cariño y respaldo en todo momento.

Nunca en mi trayectoria deportiva he recibido tanto apoyo incondicional por parte de aquellas personas que sienten los colores de nuestro Real Zaragoza. Y digo incondicional porque a pesar de los resultados siempre esta afición ha estado ahí... alentando al equipo, no dejando de perder la fe... No ha podido ser y créanme me marcho con esa deuda, esa gran deuda que espero poder pagar algún día.

He dejado en esta tierra a muchos amigos que me han demostrado su valía, he vivido aquí como en mi casa. El pequeño de mis hijos con tres años sabe entonar todo el repertorio de cánticos del Real Zaragoza, su profesora me asegura que es maño, maño.

Nunca me iré porque dejo parte de mi corazón con vosotros.

Quisiera mostrar mi agradecimiento a todos los componentes del Club por la ayuda recibida y el cariño que siempre me han mostrado. Grupo humano como éste es difícil de encontrar en este mundo del Fútbol.

No tengo ninguna duda de que el Real Zaragoza volverá a estar muy pronto en el lugar que debe ocupar, que no es otro que la Primera División y desde hoy animaré como un aficionado más, para que eso se produzca cuanto antes.

Deseo la mejor suerte a todos y cada uno de los que desde hoy tienen la misión de guiar esta nave y hacerla llegar a buen puerto.

Un abrazo fuerte

Manuel Jimenez Jiménez"