No habrá cambios, al menos por el momento, en los aforos en eventos deportivos como se venía especulando en las últimas fechas debido al suave descenso de contagios por covid. Así lo comunicó  la ministra Carolina Darias en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, que reúne al Ministerio de Sanidad y a las comunidades autónomas. 

De esta manera, La Romareda podrá seguir acogiendo a un máximo de 25.205 espectadores en los partidos del Real Zaragoza y el estadio de El Alcoraz podrá albergar a 6.000 en los de la SD Huesca. Darias agradeció la colaboración de la Real Federación Española de Fútbol y de los clubs deportivos en el cumplimiento de los acuerdos en el seno del Consejo. La ministra recordó también que los espectadores estarán sometidos a las mismas medidas de protección no farmacológicas de siempre, como el uso de mascarilla o la prohibición de comer o fumar.

Al comienzo de octubre, tras un año y medio, los estadios de fútbol volvían a tener la capacidad del cien por cien de los aforos, mientras que los de baloncesto estaban en un máximo del 80%. Sin embargo, el pasado 28 de diciembre el Consejo Interterritorial optó, ante la expansión de la variante omicrón por todo el país, de imponer esta nueva reducción, que entró en vigor el día 1 de enero y que iba a estar vigente hasta el 31 de este mismo mes, pero ahora se ratifica que no sufrirá variaciones al menos hasta el 28 de febrero, cuando se volverán a reunir para estudiar si la situación sanitaria permite aplicar alguna modificación que lleve a los acontecimientos deportivos a poder acercarse lo máximo posible al lleno.

El más afectado

En el pabellón Príncipe Felipe, el Casademont seguirá estando limitado a acoger a la mitad de aforo de su capacidad, un total de 5.450 aficionados, número que se ha visto superado más de una vez esta temporada cuando se permitía una mayor entrada, por lo que los zaragozanos son el conjunto de la comunidad más afectado. La publicación en el BOA del 28 de diciembre de las nuevas restricciones sanitarias en Aragón que ahora se mantienen obligó al equipo aragonés a establecer nuevas medidas. A partir de entonces y mientras se mantenga en vigor la última orden, quedó prohibido el consumo de comidas y bebidas dentro del Príncipe Felipe, tanto las que se venden en el interior (los bares permanecen cerrados) como las que puedan llevarse los aficionados, con excepción de una botella de, máximo, 50 cl por espectador. Restricciones que se mantienen y que habrá que esperar pues al menos hasta el mes de marzo para conocer si habrá nuevas novedades en los aforos.