Sin desviar un solo segundo la mirada hacia un Mundial que ya asoma, la selección española encara el desafío de dar el último paso hacia otra competición que quedó en el buzón de objetivos pendientes, una Liga de Naciones en la que el primer reto es repetir presencia en la final a cuatro, para lo que debe superar este sábado a Suiza en La Romareda (20.45 horas).

Luis Enrique ha prohibido a sus jugadores desviar la atención a lo que llegará en noviembre en Catar. Antes se debe cerrar un grupo que se inició de manera irregular (dos empates ante República Checa y Portugal), pero que encontró la reacción obligada precisamente en la visita a los suizos. Le concede a España un punto de ventaja sobre Portugal en la pugna por la única plaza que concede la clasificación. La opción de depender de sí misma pasa por la capital aragonesa. 

La selección helvética apenas consiguió un empate en ocho visitas a España y un solo triunfo en la historia de enfrentamientos. Pero los números engañan en el deporte en numerosas ocasiones y los últimos encuentros ante Suiza siempre han resultado más igualados de lo que se preveía.

Vencer y convencer es lo que desea el seleccionador asturiano en La Romareda, donde 19 años después regresa la selección, y para ello busca soluciones. Sobre todo ofensivas, una vez capeadas las defensivas del inicio de la clasificación con dos partidos consecutivos sin encajar. Le faltan piezas arriba, con fijos como Dani Olmo y Mikel Oyarzabal lesionados y el caso que más preocupación interna desata, Ansu Fati.

Otro regresará a la selección para tomar el mando, Pedri González, a quien las lesiones le han tenido más fuera que dentro de la selección desde que deslumbrase en la Eurocopa. Junto a Gavi, con el permiso de Koke, y Sergio Busquets, pueden presentar un centro del campo cien por cien barcelonista para la selección española.

Y en esa búsqueda continua del gol, todo apunta a que pese a la falta de minutos en sus clubes Luis Enrique priorice el rendimiento que siempre le han aportado en la selección jugadores como Pablo Sarabia y Ferran Torres más la presencia de Álvaro Morata. En la Romareda, un campo especial para el goleador del momento, también le llegará el premio tan peleado por Borja Iglesias a sus 29 años.

Sin debate en la portería que pertenece a Unai Simón, en la defensa se abre la puerta a la entrada de Eric García, con Pau Torres como pareja. La necesidad de laterales de largo recorrido, ante un rival que se espera salga a encerrarse en su terreno, da ventaja a Dani Carvajal y Jordi Alba.

Aunque Suiza, que se juega no descender de categoría y resucitó en la última cita sorprendiendo a Portugal (1-0), afirma en boca de su seleccionador, el turco Murat Yakin, que saldrá a presionar a España y a impedir que pueda desplegar su «juego atractivo». Pero la realidad es que tiene perfiles para explotar una de sus principales virtudes, el contragolpe, con Xhaka, Shaqiri y Embolo. Eso es al menos lo que espera Luis Enrique.