Los italianos Banco Popolare y Banca Popolare di Milano (BPM) han acordado fusionarse antes de finales de año, un acuerdo que dará lugar al tercer grupo bancario del país, después de Unicredit e Intesa Sanpaolo, con una capitalización de 5.500 millones de euros. Los consejos de administración de ambas entidades llegaron al acuerdo ayer y el proyecto de fusión firmado permitirá, entre otras cosas, que el nuevo grupo bancario tenga 4 millones de clientes, una cuota de mercado superior al 8% y una presencia muy significativa en las regiones de Lombardía, Véneto y Piamonte.

La transacción contempla una ampliación de capital de 1.000 millones de euros que captará Banco Popolare antes de las juntas de accionistas de ambas entidades, que se convocarán para aprobar la fusión. La operación, que creará un banco con una capitalización bursátil de casi 5.500 millones de euros, según los precios de cotización actuales, sería la primera de este tipo propiciada por una ley del Gobierno italiano de hace un año.

La legislación cambia las normas de gobernanza de la gran banca cooperativa del país, en un intento de fomentar la consolidación de un sector fragmentado. Las fusiones podrían ayudar a apuntalar la confianza de los inversores en el sistema financiero italiano, ya que la preocupación por la magnitud de la morosidad en las cuentas de las entidades italianas ha desplomado sus acciones este año.

SINERGIAS En un comunicado, los dos bancos informaron de que los accionistas de Banco Popolare serán dueños del 54% de la entidad resultante y que Popolare di Milano controlará el resto. La fusión generará sinergias de 290 millones de euros en costes y 75 millones en ingresos adicionales al año, que posiblemente se alcanzarán en el 2018. Ambas entidades prevén que sus accionistas autoricen la operación antes del 1 de noviembre.