El Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales (TARC) ha obligado a modificar el concurso de trenes AVE de Renfe, al que opta CAF. Tras un recurso de Bombardier, el juez anula la cláusula que primaba la fabricación nacional del pedido. UGT criticó ayer este cambio y abogó por priorizar a los constructores locales, al igual que Bombardier defiende en otros países de la UE. Esta adjudicación tiene un gran interés porque pondría fin a siete años de sequía en el mercado nacional.