Aragón ha perdido algo de fuelle en su potencial creador a raíz de la pandemia. Es la conclusión que se extrae de los datos publicados por la Oficina Española de Patentes y Marcas (Oepm), en los que se refleja una caída en las solicitudes de algo más del 14,6%. En cifras, el descenso se evidencia en las 259 solicitudes de 2019 frente las 221 del pasado 2020, las últimas estadísticas disponibles, que también reflejan un retroceso en los datos de todo el territorio nacional.

Al desglosar la cifra en las tres tipologías de licencias a las que se puede acceder en España, se obtiene que 96 corresponden a la patente europea, 31 a la patente española y 94 a la clase de modelos de utilidad. Las dos primeras confieren una protección de la propiedad industrial de 20 años, y es necesario superar un examen y sumergirse en un largo y costoso procedimiento. Es por ello que muchos optan ahora por proteger sus inventos con los modelos de utilidad, bastante más baratos pero que protegen la idea tan solo 10 años.

Sin embargo, más que de caída, lo correcto sería hablar de frenazo. Desde 2017, año en el que la nueva legislación nacional entró en vigor –equiparó los requisitos para conceder patentes nacionales con las europeas–, las agencias detectaron un incremento paulatino de las solicitudes. Así, Aragón tuvo un pico de peticiones de patente europea en 2019 con 133, una cifra que se redujo a 96 el pasado año.

Tomando como ejemplo la patente nacional, Aragón aportó 31 de las 1.483 solicitudes que se realizaron en 2020 en todo el país, cerca de un 2%, lo que la sitúa en el undécimo puesto por comunidades autónomas. La situación mejora en lo referente a la patente europea, donde Aragón ocupa el sexto lugar de la tabla con un 5,4% del total nacional.

«Innovador moderado»

Desde ABG, una firma especializada en propiedad industrial e intelectual, Virginia Gómez Jiménez señala que Aragón es un territorio considerado como «innovador moderado» según los indicadores de I+D, algo en la línea del resto del país.

«Es de esperar que la pandemia de covid-19 esté provocando un estancamiento en las cifras y los aumentos que se puedan producir sean leves y focalizados en áreas como el sector médico y farmacéutico, al igual que ocurre con los registros correspondientes al ámbito nacional», apunta Gómez Jiménez.

No obstante, desde ABG también destacan que a lo largo de 2020 se produjo por primera vez en diez años «un aumento del número de solicitudes de patente y de modelos de utilidad de aproximadamente un 20%». Este incremento, claro, tuvo que ver con la pandemia, ya que una parte significativa de dichas solicitudes estaban relacionadas con tecnologías médicas, apuntan desde la firma de propiedad industrial.

En esta agencia consideran que Aragón dispone de una «indudable capacidad innovadora», sobre todo en los sectores farmacéutico, biotecnológico y de ingeniería. En cuanto a las entidades que más patentes solicitan, los referentes son empresas como BSH e instituciones investigadores como la Universidad de Zaragoza, que suelen colaborar con otras instituciones para sufragar las inversiones.