CRISIS EN EL CAMPO

Las empresas agrícolas cosechan su segundo mayor margen empresarial en 14 años

Los márgenes sobre ventas del sector primario en 2023 están por encima de los registrados por la industria alimentaria, la distribución y el comercio minorista

Campos de olivar en Andalucía.

Campos de olivar en Andalucía. / EFE

Paula Blanco

Las empresas españolas de agricultura, ganadería, silvicultura y pesca alcanzaron en 2023 su segundo mejor margen empresarial desde que se toman datos. En concreto, la ratio entre el resultado bruto de explotación de las compañías del sector primario y sus ventas se situó el año pasado en el 11,51%, por detrás del récord histórico conseguido en 2017 (12,24%), según los últimos datos publicados por la Agencia Tributaria, enmarcados en el Observatorio de Márgenes Empresariales puesto en marcha conjuntamente hace casi un año por los ministerios de Hacienda y de Economía y por el Banco de España. En el último año, sus márgenes empresariales superaron a otros sectores de la cadena de valor, como la propia industria alimentaria (9,01%), la distribución (8,01%) o el comercio minorista (5,95%), todos ellos con ratios que han descendido en los últimos años por el impacto de la inflación, de la guerra en Ucrania y de los precios energéticos.

A partir de los datos de la Agencia Tributaria, se extrae que los márgenes sobre ventas de la agricultura y ganadería crecieron desde el 6,09% registrado en 2009, año en el que comienza el registro histórico del organismo, hasta 2017, cuando se produce un cambio de ciclo debido a las sequías y al recrudecimiento de los fenómenos meteorológicos. Como consecuencia, las indemnizaciones se dispararon a partir de este año: el período comprendido entre 2017 y 2023 se ha confirmado como el de mayor siniestralidad en los 43 años de historia del seguro agrario, según los datos recopilados por sistema de Seguros Agrarios Combinados (Agroseguro). En 2018 los márgenes sobre ventas se estrechan hasta situarse en el 9,35% y no se recuperan hasta 2023, fecha de su segunda cifra más alta.

Cabe destacar que las cifras aportadas por Hacienda se refieren a explotaciones agrarias y ganaderas constituidas como sociedades y deja fuera tanto a la industria alimentaria como a los autónomos, algo reseñable en un sector donde la mitad de sus trabajadores lo son por cuenta ajena. En 2022 (últimos datos conocidos del Instituto Nacional de Estadística, o INE), había un total de 486.500 personas que se dedicaban al sector primario. De ellas, unos 234.062 eran autónomos. Según la Agencia Tributaria, el número de empresas ascendió a 35.973 en 2023, un dato ligeramente inferior del registrado el año anterior (36.390 compañías). Sus ventas totales se han casi duplicado en los últimos 10 años al pasar de los 19.855 millones de euros registrados en 2013 a los 37.910,67 millones de 2023. Algo parecido ha ocurrido con la masa salarial, que ha aumentado un 55,5% en la última década.

Márgenes estrechos en la cadena alimentaria

La ratio entre el resultado bruto de explotación de las compañías del sector primario y sus ventas está por encima de la cifra registrada por otros eslabones de la cadena alimentaria. Por ejemplo, la industria alimentaria ha reducido sus márgenes sobre ventas en 2,9 puntos porcentuales desde 2017 hasta situarse en el 9,01 en 2023. En el caso de la distribución, su récord histórico tuvo lugar en 2015, cuando la ratio llegó al 11,54%. Desde entonces, ha sufrido varios vaivenes hasta situarse en el 8,05%. En cambio, los márgenes sobre ventas de las empresas de comercio minoristas de alimentación se han reducido a cerca de la mitad (5,95%) desde su mayor cifra, registrada en 2010 (9,68%). Otros sectores, como la hostelería, han alcanzado su mejor dato con un 18,85%.

En comparación con otros sectores, y a excepción del sector primario, los márgenes sobre ventas de la cadena alimentaria son más estrechos por el impacto de la inflación y de los precios energéticos. Las firmas inmobiliarias se apuntan una de las mayores cifras con un 31,87%, un dato que ha crecido a paso constante desde la crisis de 2008, mientras que las empresas de telecomunicaciones han sufrido el camino inverso al pasar del 26,70% en 2009 al 7% actual. Las constructoras han vivido algo similar al recortar a la mitad sus márgenes sobre ventas del 14,75% del 2009 al 7,82% registrado en 2023. Y otras compañías, como las relativas a la industria química, han conseguido superar este año su anterior récord del 17,01%, registrado en 2017, con un ratio entre el resultado bruto de explotación y sus ventas del 17,14%.