II CONGRESO DE MOVILIDAD INTELIGENTE Y SOSTENIBLE

Jaime Armengol (Mobility City), sobre los coches eléctricos: "España atesora a grandes reservas de litio, cobalto, wolframio y estaño que no se están explotando"

El coordinador de actividades de Mobility City asegura que explotar una mina en este país actualmente "es prácticamente imposible" y que mientras tanto "seguirán llegando coches chinos"

Jaime Armengol, coordinador de actividades de Mobility City.

Jaime Armengol, coordinador de actividades de Mobility City. / XABIER AMADO

Paula Blanco

Seis de las diez marcas de automoción eléctrica más importantes del mundo proceden de China. Teniendo en cuenta la transición ecológica que está realizando el sector en todo el mundo, y también en Europa, contar con los materiales que hacen posible la electrificación de la movilidad es más importante que nunca. En este sentido, el coordinador de actividades de Mobility City, Jaime Armengol, ha señalado que "España atesora grandes reservas de litio, cobalto, wolframio y estaño que no se están explotando". Durante su ponencia enmarcada en el II Congreso de Movilidad Inteligente y Sostenible, organizado este martes por Prensa Ibérica, El Periódico de España y 'activos' en Madrid, Armengol ha señalado que esto ocurre porque explotar una mina en España en la actualidad "es prácticamente imposible. "Mientras tanto, seguirán llegando coches chinos", ha sentenciado. El evento está patrocinado por Avanza, Cepsa, FCC, Mobility City, Fundación Ibercaja, Iberdrola, KPMG y Pinsent Masons con la colaboración de AER, ANESDOR, ANFAC, ASEPA, ATUC, Corresponsables, Ganvam, Madrid Green Urban Mobility Lab, Neomotor, Pons Mobility, Seopan y Sernauto.

En el ámbito de la electromovilidad, "España cuenta ya con una importante cadena de valor industrial para las infraestructuras de recarga", afirmó Armengol, con una aportación de fabricación nacional de entre el 70 y el 90%. El despliegue de estas infraestructuras todavía es menor en el caso español, donde no supera el 12% en comparación con otros vecinos de la región debido a las trabas administrativas y a la incertidumbre de los operadores. Y es curioso, dice el coordinador de actividades de Mobility City, porque la tecnología que poseemos contrasta con la lentitud de despliegue de recargas de ámbito público. Esa incerteza de los diversos actores que conforman la cadena de valor española de automoción procede de la baja penetración de vehículos alternativos en el país que, aunque está en alza su matriculación, contrasta con las cifras duplicadas de ventas de este tipo de coches en otros países europeos. "Los planes de ayuda han sido insuficientes", expresó.

Estos retos económicos son cruciales si tenemos en cuenta la transformación del modelo de ciudad que ha ocurrido en los últimos años, donde la hiperproximidad, resumida en "la ciudad de los 15 minutos", cobra importancia para el ciudadano. La propiedad de un coche propio ha perdido peso en detrimento con otras alternativas de movilidad, como el carsharing, el alquiler o el renting. En las urbes cada vez hay más actores: VTC, carpooling, bicicletas, patinetes y motocicletas eléctricas que se comparten, coches colaborativos. Y el futuro anticipa aún más retos ligados a la innovación. Uno de ellos es la llegada del 5G al vehículo, que determinará su salto hacia la nueva movilidad conectada, la aplicación del Big Data a partir de los millones de datos generados y la automatización de la conducción que, junto a los sistemas de movilidad colaborativos, supondrán una evolución en el sector.

Ciudades conectadas

Los datos están propiciando una mayor conectividad, y con ella, está dando lugar a la conformación de ciudades conectadas. "El futuro de la movilidad es digital, impulsado por la inteligencia artificial, la computación cuántica y el intercambio de datos junto con la interoperabilidad", ha descrito. Es, precisamente, la falta de formación y habilidades en materia de inteligencia artificial la que puede suponer un freno al despliegue de infraestructuras gestionadas de manera inteligente.

La incorporación de esta tecnología a pasos agigantados en nuestras ciudades también generan retos sociales. Ahora la preocupación vial se centra en los colectivos vulnerables, como son los patinetes, los ciclistas o los peatones, de ahí la imposición de nuevas medidas viales para garantizar la seguridad. Este último factor también afecta a los ciudadanos cuando se habla de la ciberseguridad de los coches. "Ya no solo está en juego la privacidad de quienes viajan a bordo, sino también su integridad", ha explicado.