Expectación, sí, pero menos. Tal como reflejan los datos de audiometría, el esperado cara a cara televisado entre los líderes del PP, Mariano Rajoy, y del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, fue un pelotazo de audiencia en toda España. El programa especial, que organizó y produjo la Academia de la Televisión (ATV) y emitieron simultáneamente 17 canales, logró una media de 12 millones de telespectadores en el global de España, que corresponden al 54,2% de cuota. Es decir, que más de la mitad de la población española que el lunes por la noche estaba delante del televisor sintonizó con el cara a cara.

Sin duda, una cifra espectacular y que ratifica el interés que había despertado este combate dialéctico entre los dos principales candidatos a la presidencia del Gobierno. Pero, eso sí, tuvo menos seguimiento que el último debate televisado: el 25 de febrero del 2008, Mariano Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero reunieron a una media de 13 millones de personas, que corresponde al 59,1% de share. Un millón más de telespectadores (y cinco puntos más de cuota) que las del lunes.

Según Kantar Media, entre las ocho televisiones que ofrecieron simultáneamente el cara a cara sumaron una media de 1.333.000 espectadores. TVE-1 fue la cadena en la que la inmensa mayoría de españoles siguieron el debate, con 5.485.000 espectadores (24,8%). La siguen Antena 3 (2.071.000), La Sexta (1.346.000), Cuatro (949.000) e Intereconomía (784.000).

EN ARAGÓN En Aragón las cifras de audiencia superaron la media española, ya que la cuota de pantalla fue del 58,7%. La tele autonómica Aragón Televisión, con 63.000 espectadores y un 10,1% de audiencia, fue la tercera opción elegida en la comunidad por detrás de TVE-1 y Antena 3 para seguir el desarrollo de debate entre Rajoy y Rubalcaba.