Instituciones autonómicas y locales del tamaño de las aragonesas poco pueden hacer para compensar las consecuencias que la retirada de fondos de EEUU está teniendo para la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) y para los millones de personas que dependen de su ayuda. Pero sí que han querido tener un gesto para paliarlas en la medida de lo posible. A finales de octubre, el Comité Aragonés de Emergencias aprobó destinar 200.000 extraordinarios para la UNRWA. 100.000 los aporta el Gobierno de Aragón, 50.000 la Diputación de Zaragoza y otro tanto el ayuntamiento de la capital aragonesa.

«No se trata tanto de compensar la pérdida económica como de reforzar su apoyo», comentaba la semana pasada Raquel Martí, directora ejecutiva de UNRWA España, durante una visita relámpago a esas tres instituciones aragonesas.

Según fuentes del Área de Cooperación del Ayuntamiento de Zaragoza, esos 200.000 euros se destinarán a programas de alimentos para los refugiados palestinos. Esas mismas fuentes reconocen que la aportación es más simbólica que significativa en términos económicos. «Es sobre todo una escenificación ante la sociedad aragonesa de nuestro compromiso, motivado por el descenso de los fondos de EEUU». De hecho, en el momento en que se conoció la retirada de fondos la Corporación municipal zaragozana hizo una declaración ratificando su apoyo a la UNRWA.

El Ayuntamiento de Zaragoza ha mantenido una estrecha colaboración con el comité español de la UNRWA desde su creación, en el año 2006. Desde esta fecha ha aportando más de 1,1 millones de euros para la ejecución de sus proyectos.

Este año, con casi toda seguridad, habrá nuevos fondos de Zaragoza para los refugiados palestinos, pues el consistorio está a punto de resolver la convocatoria de subvenciones para proyectos de cooperación al desarrollo, y la UNRWA es una firme candidata a repetir entre las oenegés seleccionadas.

Además, durante su reunión con Raquel Martí de la semana pasada, la vicealcaldesa de Zaragoza, Luisa Broto, consideró «fundamental» el mantenimiento de los servicios que presta la UNRWA. Broto se comprometió a apoyar acciones de sensibilización dirigidas a la población zaragozana para favorecer el conocimiento de la situación y a sumarse a las iniciativas de incidencia política en defensa del legítimo derecho de la población palestina a vivir en paz en su territorio.