Solo faltan los flecos puesto que la mayoría de actos que tendrán lugar durante la semana del Pilar en Zaragoza ya están organizados, aunque haya cosas que todavía no se hayan hecho públicas. Lo que sí se sabe ya es cuánto le costará la programación a las arcas del consistorio: casi dos millones de euros, lo que supone una cifra muy similar a la que se gastaba cuando no había covid y sí había fiestas. Así lo confirmó ayer la vicealcaldesa y concejala de Cultura, Sara Fernández, en la comisión de su área.

Sorprende por tanto que, habiéndose suspendido algunos actos, el gasto vaya a ser similar para el erario público. ¿La explicación? Que no van a ser tantos menos los conciertos y actividades que vaya a haber y que, además, los que sí que se hagan van a ser más caros de organizar, puesto que las medidas de seguridad a las que obliga la pandemia encarecen el coste.

Todos los recintos donde se celebren actividades estarán vallados para controlar los aforos, y muchos espacios además estarán protegidos con mallas de ocultación para que no haya gente con la tentación de asomarse sin tener entrada, lo que podría generar aglomeraciones. Hasta el recorrido de la Ofrenda de flores a su paso por la plaza del Pilar estará tapado. Y todo eso aumenta los gastos.

Para hacerse una idea de lo que paga el ayuntamiento por cada uno de los eventos, el montaje y el mantenimiento de la estructura donde se depositan las flores a la Virgen del Pilar lo ha licitado el consistorio por un valor máximo de 42.955 euros con IVA.

Y en el alquiler, montaje, desmontaje, transporte, carga, descarga y mantenimiento del escenario que estará en el Parque del Agua, el más grande que se va a instalar este año (tendrá un aforo de 4.000 personas), el precio de salida era de 29.000 euros, 35.090 con el IVA. No obstante, son los precios al alza ya que cada empresa que quiera optar a llevarse el concurso puede ofrecer más dinero para ganar la puja.

Ya en verano, el equipo de Gobierno de PP y Cs realizó una modificación en los presupuestos para dotar con 1,1 millones más a Zaragoza Cultural para poder organizar todos los actos.

Lo que sí que será diferente este año son los ingresos. Antes de la pandemia, de los dos millones que gastaba el consistorio para los actos de las Fiestas del Pilar, un millón lo recuperaba gracias a los patrocinios y los cánones que han de pagar los promotores privados de conciertos, los mercadillos y los puestos de comida de las casas regionales en la plaza Aragón.

Este año, por ejemplo, la empresa encargada del montaje del ferial de Valdespartera no tendrá que pagar un canon como tal, sino uno en especie. Bastará con que se haga cargo de los costes que supongan las medidas anticovid en el recinto, que no serán pocos, y publicitar el espacio con diferentes campañas, que tendrán que tener un coste aproximado de 6.000 euros.

Así, en los próximos días se irán cerrando los últimos contratos pendientes y entonces se conocerá cuánto puede recuperar el ayuntamiento por patrocinios. De la programación en los diferentes espacios de conciertos y plazas falta conocer todavía bastante, aunque será esta semana que viene cuando se desvelen los detalles.