Lesa humanidad

Italia bloquea la extradición de un capellán acusado de crímenes durante la dictadura de Argentina

De acuerdo con las actas mediante las cuales Italia paralizó el traslado de Reverberi (Sorbolo, Italia, 1937) a Argentina, el acusado “es un hombre de 86 años con diversas patologías cardíacas”

Italia bloquea la extradición de un capellán acusado de crímenes durante la dictadura de Argentina.

Italia bloquea la extradición de un capellán acusado de crímenes durante la dictadura de Argentina. / SHUTTERSTOCK

Irene Savio

Una de cal y otra de arena para los procesos judiciales aún en curso sobre la dictadura argentina (1976-83). El ministro de Justicia de Italia, Carlo Nordio, ha rechazado la extradición del capellán Franco Reverberi Boschi, requerido en Argentina para un juicio por crímenes de lesa humanidad. La decisión, tomada el pasado 10 de enero pero que se ha conocido este viernes, llega poco después de que esta misma semana se informara de que en abril próximo se abrirá en Italia otro proceso, en este caso contra el excoronel Carlos Malatto, otro fugado y también acusado de haber sido parte del plan de secuestro, tortura y exterminio ejecutado en los años setenta en el país latinoamericano.

En el caso de Reverberi, la noticia de la denegación de extradición fue dada por la organización no gubernamental 24 de marzo. “Nordio ha rechazado la extradición por motivos de salud, que en realidad ya habían sido examinados [por el Tribunal Supremo italiano]”, ha explicado su presidente, Jorge Ithurburu, en declaraciones a este diario. 

De acuerdo con las actas mediante las cuales Italia paralizó el traslado de Reverberi (Sorbolo, Italia, 1937) a Argentina, el acusado “es un hombre de 86 años con diversas patologías cardíacas”. Por esta razón, se lee en un documento firmado por Nordio, la decisión se ha tomado en razón de “la consiguiente perspectiva probable de no regresar al territorio italiano”, lo que “podría derivar en un estrés psicológico significativo” y ser “un factor de riesgo adicional en relación con las patologías cardíacas verificadas”.

Curas y militares

La historia de Reverberi Boschi salió a la luz primero en 2010, cuando inició un primer juicio por delitos de lesa humanidad en la provincia de Mendoza, ciudad en el noroeste de Argentina. En esa circunstancia, Reverberi Boschi fue inicialmente convocado en calidad de testigo. Sin embargo, cinco víctimas lo reconocieron y declararon haberle visto en los calabozos de un centro clandestino. Allí el cura a veces bendecía las armas con las que luego torturaba a los presos, otras rezaba con la biblia en mano, relataron. Pero, cuando finalmente lo llamaron como investigado, ya había huido.

Otro es el caso de fuga es el de Malatto, un exmilitar que iba a ser enjuiciado en 2011 en San Juan, pero también huyó y cuyo rastro se perdió hasta 2019. Ese año, sin embargo, dos periodistas del diario italiano La Repubblica lo encontraron en un lujoso apartamento en provincia de Messina, Sicilia. Todo ello a pesar de que, de acuerdo testimonios recogidos en 1983, había sido identificada la participación de Malatto en la brutal represión argentina, junto al general Luciano Benjamin Menéndez y al mayor Jorge Olivera, ya en esa época.

Plan Cóndor

Tanto es así que todos los acusados ante el Tribunal de San Juan en 2011, 2015 y 2018, fueron declarados culpables. Todos menos Malatto, a causa de que en Argentina no se admiten los juzgamientos en ausencia en este tipo de casos. De ahí que la lucha de familiares y víctimas prosiguiera en Italia. Crímenes por los que ahora Malatto deberá responder en el país transalpino, donde el excoronel está acusado del homicidio de ocho personas: Juan Carlos Campora, Marie Anne Erize Tisseau, Jorge Bonil, Alberto Carvajal, Daniel Russo, Alfredo Lerouc, Marta Saroff y Florentino Arias.

En verdad, en Italia, los juicios contra exrepresores y cómplices de las dictaduras latinoamericanas no son nuevos. Ya en 2011, el exmilitar uruguayo Jorge Néstor Troccoli fue condenado --con una sentencia definitiva a cadena perpetua-- por el Tribunal Supremo de Italia por participar en la desaparición de ciudadanos italianos en el Plan Cóndor, el nombre dado a las actividades de represión en las décadas de 1970 y 1980 en Argentina, Bolivia, Chile, Paraguay, Uruguay y Brasil, apoyadas por Estados Unidos.