El vínculo ancestral del municipio con San Juan de la Peña

En el corazón de la historia de Encinacorba late un vínculo ancestral con la Real Hermandad de San Juan de la Peña, una conexión que se remonta al siglo XIII cuando, a consecuencia del decreto pontificio, los bienes que los templarios poseían en Aragón fueron entregados por Jaime II a la Orden de San Juan de Jerusalén. Este acto histórico convirtió a Encinacorba en la cabeza de la Encomienda de su nombre.

A pesar de estar enclavada dentro del territorio de la Comunidad de Daroca, Encinacorba figuraba como un lugar exento de su jurisdicción, debido a su pertenencia a la dominicatura Sanjuanista. Esta distinción resalta la importancia y el prestigio que la localidad alcanzó dentro de la hermandad.

La presencia de los caballeros de San Juan de la Peña en Encinacorba el 13 de abril, debe recordar la importancia de preservar y valorar la identidad y los lazos históricos, y que este encuentro sea un símbolo de continuidad y un recordatorio de que la localidad es parte de una tradición que traspasa las fronteras del tiempo.

Desde el ayuntamiento señalan que «en Encinacorba la historia vive en cada piedra y en cada callejón, recordándonos que somos herederos de un legado que merece ser honrado y protegido. Que la visita de los caballeros de la Hermandad de San Juan de la Peña sea un tributo a nuestra historia y un augurio de un futuro lleno de prosperidad y continuidad».