Apenas 24 horas después de celebrarse el pleno, el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, decretó el paquete de medidas de ahorro "contundentes" y "ambiciosas" que permitirá reducir el gasto municipal en unos 20 millones de euros al año. Iniciativas algunas de calado como la reestructuración administrativa y el adelgazamiento en el número de sociedades y patronatos, como le exigían CHA e IU, socios en este primer pack de austeridad, y otras con un carácter más simbólico, como la reducción del parque móvil al 50% y de coches oficiales en un 30%, o la sustanciosa reducción de gastos de protocolo y representación, de patrocinios a eventos culturales y deportivos. Recortes en gastos que, en una situación económica tan crítica, se pueden considerar superfluos o cuanto menos necesarios para una gestión más eficiente en el consistorio zaragozano.

Las circunstancias obligan, con la imposibilidad de incrementar el endeudamiento a largo plazo o de cerrar el año con déficit, había que acompasar los gastos a unos ingresos que han decrecido como consecuencia de las enormes dificultades que el ayuntamiento tiene para vender suelo, principal fuente de ingresos del consistorio en los años de bonanza.

DESPUÉS, LOS INGRESOS Más adelante, habrá que abordar también el capítulo de ingresos, con las ordenanzas fiscales y la subida de impuestos y tasas municipales, pero el de ayer era un primer paso obligado. Y más si, como aseguró el alcalde, su objetivo es que Zaragoza "a finales del 2012 haya conseguido absorber todas las consecuencias negativas de la crisis" y empezar a pensar en una nueva etapa de crecimiento, al recuperar el equilibrio financiero entre gastos e ingresos.

Pero falta otra cuestión pendiente para solucionar el problema de la financiación de los servicios en la ciudad: las competencias impropias que asume el ayuntamiento y la futura Ley de Capitalidad que debería solucionarlo. El alcalde ya ha solicitado a la presidenta de Aragón una reunión para abordar esta cuestión, ya que "hablando de ser solidarios, si la DGA pagara solo el 50% (de competencias impropias) estaríamos hablando de 50 millones más" para las arcas.

DECISIONES IMPORTANTES Pero el plan de austeridad anunciado ayer incluía decisiones importantes que supondrán una reducción del gasto notable. Iniciativas como la disminución del número de kilómetros recorridos por los autobuses urbanos, en torno a un millón menos al año, que supondrá pagarle a la contrata, TUZSA, unos cuatro millones menos, o la necesidad de redefinir la consideración de tasa municipal a precio público o privado, con el objetivo de que el ayuntamiento pueda deducirse el IVA como prestador del servicio y producir un ahorro fiscal de dos millones de euros.

Esta consideración de precio --y no tasa-- no afectaría a impuestos como el IBI, el IAE o el de Circulación, los más habituales, sino al que se paga en el autobús urbano, el agua y la recogida de basura, o en las piscinas e instalaciones deportivas. El Gobierno dice que puede sacar partido de esta redefinición sin afectar al usuario. Lo negociará con CHA e IU.

Otras de las decisiones importantes van referidas al adelgazamiento de la estructura administrativa. El vicealcalde, Fernando Gimeno, comentó la necesidad de reagrupar las sociedades y patronatos municipales (el objetivo es que desaparezcan los cinco patronatos) y poner en marcha una Entidad Empresarial Pública municpal que lleve el control del gasto y del personal de todas las sociedades de una forma más eficiente. O la reducción de jefaturas de servicio (aún no se ha decidido cuántas ni cuáles) y la amortización de las plazas vacantes.