Miles de zaragozanos ya no necesitarán coger el coche para moverse por la ciudad durante las próximas fiestas del Pilar, gracias al tranvía, ya que este estará circulando las 24 horas del día. La sociedad que lo gestiona, Los Tranvías de Zaragoza, y el Ayuntamiento de Zaragoza así lo han decidido y ya se ha empezado a publicitar en las marquesinas de la línea. Y será así para los ocho días festivos en los que la ciudad se vuelca con las actividades en la calle, muchas de ellas en el centro, y ante los numerosos desplazamientos que se producirán cuando, además, muchas de las arterias principales de entrada (todo el entorno de la plaza Paraíso, paseo Independencia, Coso, César Augusto, puente de Santiago) están en obras y generan importantes afecciones al tráfico en la capital aragonesa.
Según explicó a este diario el gerente de Los Tranvías de Zaragoza, Alejandro Moreno, "hemos decidido que esté todo el día funcionando y con unas frecuencias de cinco minutos entre las siete de la mañana y las doce de la noche, y de siete minutos entre la medianoche y las siete de la mañana". Unos tiempos de paso similares a los que tiene en hora punta de forma habitual en días laborables, las circulaciones que más viajeros mueve en la línea.
REPUNTE IMPREDECIBLE Sacar el tráfico privado del centro es uno de los objetivos claros de esta medida junto con la posibilidad de ofrecer un transporte público de alta capacidad que conecte Gran Vía con el recinto ferial de Valdespartera. Allí, una de las paradas queda a pocos minutos andando de la entrada principal de un espacio que cada año mueve a miles de visitantes y, por otra parte, genera importantes problemas de tráfico en la zona y de estacionamiento en días de máxima afluencia. Especialmente los fines de semana.
También favorece la movilidad en el sentido contrario, sobre todo si se confirma la instalación de casetas en los bulevares de Gran Vía como era tradición. Este año no está garantizado, sobre todo después de las dificultades que hubo el año pasado, cuando todavía estaban desarrollándose las obras de construcción de la primera fase.
Este año es diferente. Con el tranvía circulando, el mayor problema (si se puede considerar un problema) es calcular cuál será la demanda real cuando se inicien las fiestas, el 8 de octubre. Se espera "un repunte muy importante", pero ni la sociedad gestora ni Movilidad en el ayuntamiento se atreven a hacer estimaciones. "Es la primera vez que estará en servicio para las fiestas y cualquier cálculo se puede superar fácilmente", apuntó Alejandro Moreno. El número de turistas en la ciudad esos días o los desplazamientos a Valdespartera (que pueden incrementarse notablemente con el tranvía) solo auguran un incremento exponencial en los usos. Su estreno en las fiestas puede batir todos los récords.
Por eso ya se está trabajando en preparar un "dispositivo especial" para las fiestas. "Tendremos que reforzar el número de conductores, de revisores, de personal de limpieza y también nos obligará a poner todos los vehículos en circulación" apuntó el gerente de Los Tranvías de Zaragoza. Ahora hay un total de once Urbos 3 disponibles para estar en servicio pero en las instalaciones del tranvía ya hay preparada otra unidad, la número doce, que ya ha superado su puesta a punto técnica y está pendiente de recibir los permisos administrativos correspondientes.
