Las fuerzas de seguridad ya venían advirtiendo de la peligrosidad que presentaba la cercanía de la Ronda Norte con las carpas de Interpeñas, sobre todo a la hora de desalojar de madrugada el recinto. Anteayer, sin ir más lejos, un joven ebrio era atropellado en la calle Luciano Gracia, a pocos metros del suceso de ayer.

La Policía mostraba su preocupación porque había detectado cómo algunos jóvenes accedían a esta vía de alta velocidad en busca de un taxi. Este diario se hizo eco de su llamada de atención el martes. Y, a falta de conocerse las causas exactas de la tragedia, vecinos y fuentes del sector del taxi confirmaban ayer que, efectivamente, no resulta tan extraño ver cómo algunos ciudadanos desembocan en la A-2. Y los hay tan insensatos que incluso se atreven a cruzarla.

"Cuando hay un parón o un atasco, es verdad que algún espabilado sube para adelantarse a los que están esperando en la cola de la rotonda. Pero desde las emisoras y los GPS se pide que no los cojan en la autopista para evitar precisamente ese riesgo, porque los chavales se la están jugando", admite un taxista.

"Sí que es verdad que se ven imprudentes caminando por los andenes porque hay escasez de taxis a ciertas horas y esperas de hasta una hora en las puertas de Interpeñas. Y también lo es que algunos taxistas paran, con lo que eso conlleva de peligroso para los demás vehículos", dice otro que tampoco quiere dar a conocer su identidad.

Otras voces señalan que de 6.00 a 7.00 horas se comienza a tener prisa por llegar a las vaquillas para empalmar, y urge encontrar un taxi. Aunque la hora punta de salida de las carpas y de demanda de transporte suele transcurrir de 2.00 a 5.00 horas.

Lo cierto es que han arreciado las críticas por la falta de taxis a ciertas horas. Sin embargo, desde la Asociación Provincial de Autotaxis, su presidente, Luis Miguel de Torres, defiende la oferta y la organización y el control para acceder a los autobuses y los taxis por parte de la Policía Local es total y "muy bueno".

Con respecto a los autobuses, desde TUZSA se recuerda que la planificación de la flota se diseña a partir de los datos obtenidos el año anterior. De hecho, las lanzaderas que salen del paseo María Agustín tienen una frecuencia de cuatro minutos desde las once de la noche a las seis de la madrugada, y de seis minutos a partir de esa hora. Por otro lado, las quejas hacia la concesionaria de transportes han partido de los vecinos y trabajadores que esperan en las paradas habituales para ir a trabajar y comprueban cómo los autocares llegan llenos.