AUZ, la empresa concesionaria del autobús urbano de Zaragoza, sostiene que no ha incumplido la contrata al despedir a 125 empleados porque, aunque el pliego de condiciones del concurso incluía la subrogación de la plantilla, "lo que no establece es su mantenimiento", según sostuvo el letrado de la empresa, Arturo Acebal.

La Sala de lo Social del Tribunal de Justicia de Aragón (TSJA) acogió ayer, con un inusual lleno que coincidió con la sonora protesta de los trabajadores de AUZ en el Coso, la vista oral de la demanda en la que el comité de empresa, representado por el letrado Vidal Aragonés, del Colectivo Ronda, solicitó que esos despidos sean declarados nulos o no ajustados a derecho.

La demanda sostiene que la empresa incumplió el deber de negociar, ya que los 125 despidos y 28 prejubilaciones que ejecutó en agosto coinciden con el objetivo de 150 bajas del que EL PERIÓDICO ya informó el 3 de julio, y que provocó la indefensión de los trabajadores al ocultarle "información esencial" al comité.

También mantiene que la extinción de los contratos fue desproporcionada --la plantilla hizo casi 3.000 horas extra en agosto, tras los ceses, después de acumular 10 por trabajador de enero a julio--, que AUZ desoyó medidas que habrían permitido atenuar e incluso evitar los efectos del ERE --como la oferta de aumento de medio millón de kilómetros que ofreció el ayuntamiento o la propuesta de rebaja salarial del 4,4% de la parte social-- y, también, que "la causa expresada (por la empresa) no es real ni cierta", ya que los propios planteamientos de la concesionaria ven posible readmitir a los despedidos en unos años.

Acebal, por su parte, señaló que, como consecuencia del envejecimiento de la plantilla --hoy tiene 61 mayores de 61 años--, ese reingreso puede producirse en cinco años --nunca en los dos que propone el comité-- con un ritmo de 15 el año que viene, 16 el siguiente, 25 en el 2016 y el resto en los dos posteriores, además de acelerarse si en el 2014 el consistorio aumenta en medio millón de kilómetros la encomienda a la concesionaria.

CIFRAS Sin embargo, sostuvo que explotar la contrata con la plantilla anterior iba a resultarle tan gravoso como para ver reducidos sus ingresos en una media de 10 millones al año al disponer de casi tres millones de kilómetros menos que recorrer --explota 18 millones anuales-- y haber bajado su precio de 4,86 a 4,28 euros por kilómetro.

"Es de sentido común que si tengo menos kilómetros tengo menos autobuses (43, más dos líneas suprimidas), y si tengo menos autobuses necesito menos trabajadores", deslizó el letrado de AUZ, decidida a cargar en el empleo los efectos que el nuevo escenario económico pueda tener en sus cuentas.

Acebal negó que la empresa negociara con mala fe --"la cifra final es producto de la negociación"--, que ocultara datos al comité y que los despidos no fueran ajustados a derecho: "Traen causa de las nuevas condiciones de la contrata", indicó, antes de añadir que el motivo de los ceses es de naturaleza "productiva" pese a tratarse de la explotación de un servicio público.

También aseguró que el propio ayuntamiento habilitó a la empresa para reducir la plantilla al indicar que la estructura de esta debía ser "proporcional al servicio".