Trece comunidades en alerta por temperaturas asfixiantes

Trece comunidades --seis de ellas con aviso naranja-- inician la primera ola de calor del verano en alerta debido a las temperaturas asfixiantes que se esperan, que superarán los 41 grados. Casi toda España se verá envuelta bajo el abrigo del calor hasta el jueves, cuando comenzará un descenso generalizado de las temperaturas.

La presencia de aire muy seco en el interior peninsular, unido a cielos despejados, provocará una fuerte insolación que ayudará a alcanzar temperaturas máximas muy altas, según explicó a Efe, Ángel Alcázar, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Se prevé que hoy sea el día más caluroso y los mercurios más altos se registrarán en zonas del País Vasco, donde se pueden alcanzar 39 grados, en la cuenca del Ebro y en amplias áreas de la mitad sur de la Península.

Alcázar destacó que "lo que más singulariza" a esta ola de calor es que será "cambiante", porque las altas temperaturas afectarán cada día a un área distinta de la geografía española. Así, el domingo el calor ya empezó a notarse con fuerza en Mérida (Badajoz), Montoro (Córdoba) y Andújar (Jaén), en donde se alcanzaron valores cercanos a los 42 grados.

LA MÍNIMA, EN TERUEL

Ayer hubo hasta 41 grados en gran parte del interior peninsular y en los valles del Tajo, Guadiana y Guadalquivir. Además, todas las provincias superarán los 30 grados excepto zonas del levante, en donde Alicante, Barcelona, Castellón, Málaga, Tarragona y Valencia tuvieron una máxima de entre 28 y 29 grados.

Por la noche, Madrid, Cáceres y Almería registraron los valores más altos con mínimas de 23 grados --lo que se asemeja a noches tropicales--, mientras que las más frescas fueron en Lugo, con apenas 15 grados, y Teruel, con 13.

La situación empezará a variar el miércoles, cuando se espera un alivio de las temperaturas con la llegada de aire atlántico que favorecerá que las máximas comiencen a remitir en el noroeste peninsular, especialmente en el Cantábrico, y en las zonas de los valles del Tajo y del Guadalquivir.

Así, a partir del jueves, habrá un descenso de las temperaturas casi general en prácticamente toda la península que afectará especialmente a áreas del Cantábrico y del Alto Ebro, donde remitirá el calor.