Un hombre acusado de atracar en una calle de Zaragoza a una persona invidente ha reconocido los hechos ante el juez y se ha beneficiado de una reducción de la condena de tres años a un año y medio, si bien será encarcelado porque tiene varios antecedentes por hechos similares.
El imputado, A. M., ha reconocido esta semana que sobre las 12 horas del día 14 de octubre del 2019 abordó en el paseo de Calanda a una persona con una discapacidad visual a la que pidió su teléfono móvil con la excusa de que iba a llamar a una ambulancia porque le dolía la pierna.
El invidente no se fio de él y no el dejó el aparato, pero el acusado reaccionó entonces arrancándole una cadena de oro que llevaba al cuello y de la que colgaban dos medallas, tras lo cual se dio a la fuga. Sin embargo, gracias a la ayuda de una testigo, fue detenido poco después por agentes de Policía en la calle de San Antonio Abad, en las inmediaciones del lugar del asalto.
Como consecuencia del tirón, la víctima sufrió una cervicalgia de la que tardó en curar cinco días no impeditivos. No le quedaron secuelas y recibió una primera asistencia facultativa, según recoge el relato de los hechos.
Ingreso en prisión
Las medallas, valoradas en 310 euros, fueron recuperadas por su dueño, una de ellas, de la Virgen de santa Lucía, fue hallada por una persona en el lugar de los hechos, y la otra, de la virgen del Pilar, por un funcionario del Cuerpo Nacional de Policía en las escaleras del patio de acceso a la comisaría de la calle General Mayandía, adonde el acusado fue conducido tras su detención.
Todo apunta a que intentó desprenderse de ella con el fin de que no se le encontraran en su poder. La reparación de la cadena costó 12 euros.
El fiscal había calificado los hechos con constitutivos de un delito de robo y otro de lesiones, con la situación agravante de reincidencia. Por el primer delito pedía inicialmente tres años de cárcel, y por el segundo dos meses de multa a razón de ocho euros diarios, es decir, un total de 480 euros. En concepto de responsabilidad civil, el ministerio público solicitaba 162 euros en total.
Sin embargo, la letrada de A. M., Carmen Sánchez Herrero, llegó a un acuerdo con el fiscal después de que su cliente reconociera los hechos y abonara las cantidades solicitadas. Gracias a ello consiguió que se aplique la circunstancia atenuante de reparación del daño.
«La pena de cárcel se ha reducido a la mitad, pero aun así irá a la cárcel porque posee antecedentes delictivos y ya nos se puede beneficiar de una suspensión condicional de la condena», señaló ayer Carmen Sánchez Herrero, que aseguró que el acuerdo alcanzado con el ministerio público alcanzado con el fiscal era satisfactorio dado que supone una rebaja del 50% en la duración del tiempo de estancia de su cliente en la cárcel.
Con antecedentes
Al acusado, A. M., le constan condenas por cuatro delitos leves de hurto en sentencias dictadas en julio, agosto y octubre del 2018 y en febrero del 2019. Asimismo tiene antecedentes judiciales por dos delitos de robo con violencia (similares al caso del invidente) en sentencias de junio y septiembre del 2019, según el escrito de acusación presentado por la Fiscalía Provincial de Zaragoza ante el Juzgado de Instrucción número 4 de la capital aragonesa, con fecha de 15 de noviembre del año pasado.
